SOFÍA LOREN: EL REGRESO DE LA LEYENDA.
A sus 86 años y tras una década alejada de los rodajes, la gran actriz italiana retorna a la pantalla dirigida por su hijo Edoardo, en La vida por delante, cinta estrenada hace poco por Netflix.
Bajo la dirección de su hijo Edoardo Ponti, la estrella del cine reaparece en la cinta La vida por delante, estrenada en Netflix.
Uno de los últimos mitos vivos de la era dorada de Hollywood pasa sus días sola en Ginebra, Suiza. Lleva gran parte de 2020 confinada en el apartamento en el que crio a Carlo Jr. y Edoardo, sus hijos con el fallecido productor Carlo Ponti, el gran amor de su vida, además de su agente y principal promotor tras descubrirla en un concurso de belleza cuando tenía 16 años. Para continuar con esa tradición de trabajar en familia, Sofía Loren protagoniza La vida por delante bajo la dirección de Edoardo, el menor de sus herederos.
La cinta es una adaptación de una novela homónima de Romain Gary que cuenta la historia de Madame Rosa, sobreviviente del holocausto judío que forja un especial vínculo con Momo, un inmigrante senegalés de 12 años. La producción, “sobre el amor y la tolerancia”, según Loren, aborda temas de plena actualidad como el racismo, la crisis migratoria y las barreras culturales e intergeneracionales.
La propia Sofía padeció en su infancia las atrocidades de la Segunda Guerra Mundial. Según escribió en sus memorias, Ayer, hoy y mañana, sus primeros recuerdos son los bombardeos de los aliados sobre Pozzuoli, el suburbio de Nápoles en el que creció en la miseria. En uno de esos hostigamientos una esquirla le dejó una cicatriz en la mandíbula.
En una entrevista que Sofía y Edoardo le concedieron a The Telegraph, de Londres, ella declaró que, a sus 86 años, se considera a sí misma la actriz más incansable de la industria y no descarta asumir un nuevo rol cuando pase la pandemia
del coronavirus. Para el rodaje de esta película no tuvo ningún problema en trabajar diez horas al día y aseguró que habría podido hacerlo el doble, como en los viejos tiempos. Todas las mañanas hace ejercicio en una bicicleta estática y es muy disciplinada con su dieta, a pesar de que la cocina es una de sus pasiones y gran terapia en tiempos de cuarentena.
Aunque el confinamiento ha afectado su estado de ánimo, confía en que vendrán mejores cosas. Entre ellas, el Óscar que ella y el filme de su hijo merecen. En 1962, Loren fue la primera actriz en obtener el codiciado premio por su actuación en una película en lengua extranjera, gracias a su papel en Dos mujeres. En ese momento estaba tan nerviosa por ganar o sentirse frustrada por perder, que la noche de la ceremonia se quedó en su casa cocinando.
Edoardo, por su parte, corroboró la inacabable energía de su madre y comentó que su estrecha relación con ella, la intuición que comparten sin mediar palabras, facilitó la filmación, sobre todo en las escenas más emotivas. Eso sí, aclaró que nunca dejó de exigirle el máximo, pues conoce
talento.• más que nadie su potencial y su