Confirman fallo por trata de personas en Argentina
La Justicia argentina confirmó la condena de siete años de cárcel impuesta a uno de los dueños de un local nocturno en el sur del país por trata de personas, tras un proceso histórico y “durísimo”, por ser el primero de este tipo impulsado por una de las víctimas, dijo su abogada.
La Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, consideró a Pedro Eduardo Montoya responsable del delito de trata de personas agravado por la pluralidad de víctimas, siete en total.
Rechazó así el recurso que había interpuesto la defensa de Montoya y confirmó la pena que el Tribunal Oral en lo Criminal de Tierra del Fuego le había impuesto en noviembre de 2016.
Él y su esposa, Claudia Ivana García, eran propietarios del local nocturno “Sheik” donde durante años se explotó sexualmente a mujeres.
UNA VÍCTIMA DENUNCIÓ
Entre ellas estuvo Alika Kinan, quien en 2013 se constituyó como parte querellante, dando inicio así al primer proceso por trata impulsado por una víctima en este país.
Su abogada, Marcela Rodríguez, consideró el fallo “fuertemente positivo” y señaló que para Kinan y la otra víctima que declaró de forma anónima el proceso ha sido “muy difícil”.
“Sostener un proceso de estas características es muy doloroso: implica evocar cuestiones muy difíciles. Ninguna mujer está preparada para escucharse a sí misma decir: ‘me violaban 20, 30 veces por día, siete días a la semana, durante años’”, manifestó.
También en noviembre de 2016, la Justicia condenó a tres años de prisión a García y a Lucy Alberca Campos, la encargada del lugar, como “partícipes necesarias” del delito de trata.
Sin embargo, la Cámara Federal ordenó realizar un nuevo juicio para que se determine su grado de participación en los hechos, tal y como pidió la querella de Kinan, que las considera “coautoras” por haber ejecutado “acciones propias” contra las mujeres.
La abogada, también señaló que, las autoridades municipales no actuaron cuando en los hospitales les realizaban a las víctimas exámenes ginecológicos y de sangre y les entregaban “libretas sanitarias” para confirmar que no tenían una enfermedad de transmisión sexual.
La Cámara Federal consideró que explotaron a Kinan entre el 8 de marzo de 2010 y el 9 de octubre de 2012, lo que supone un periodo mayor al que había contemplado el tribunal fueguino.
Todo comenzó en
2012, cuando una de las mujeres que trabajaba en el local se escapó y la Policía la liberó junto a otras seis mujeres entre las que se encontraba Kinan, quien fue víctima de explotación sexual durante
20 años.