Así fue como dieron con el ingeniero caleño que terminó delatando al Chapo Guzmán
El juicio que se desarrolla desde noviembre de
2018 en la Corte Federal de Distrito en Brooklyn, Nueva York, en contra de Joaquín Guzmán Loera, narcotraficante mexicano conocido como el Chapo, sigue revelando detalles desconocidos.
Durante las últimas sesiones realizadas esta semana se dio a conocer la presunta participación del ingeniero de sistemas Cristian Rodríguez, oriundo de Cali, como jefe encargado de encriptar las comunicaciones del Cartel de Sinaloa durante
2010.
Este hombre, según autoridades de Estados Unidos, habría sido contratado por el Chapo para crear una red encubierta imperceptible a los radares de las autoridades norteamericanas.
El sistema encriptado contaba con internet inalámbrico en las montañas de Sinaloa para facilitar las comunicaciones entre los diferentes miembros del grupo ilegal. Cada persona tenía un número único de extensión.
“UN INGENIERO IRRESPONSABLE”
La primera persona en hablar sobre el papel del ingeniero de sistemas en el Cartel de Sinaloa fue el exnarcotraficante colombiano Jorge Milton Cifuentes Villa, de 52 años y oriundo de Medellín, quien respondió al interrogatorio de la decimoséptima jornada del juicio a mediados del pasado diciembre. Esta persona también figuraba como proveedor de cocaína de la organización.
Según reveló el portal Tiempo Latino, Cifuentes narró que diseñó y constituyó una red de comunicaciones cifradas para el Chapo, para lo cual habría contratado los servicios del ingeniero colombiano Cristian Rodríguez.
De esta manera, explicó que se trataba de un sistema que ofrecía “comunicaciones seguras por voz, texto y datos, todo esto sin que “las autoridades vieran lo que estábamos haciendo”.
Sin embargo, Cifuentes detalló que Rodríguez olvidó renovar la licencia de su software de seguridad, lo que permitió que el sistema fuera interceptado por las autoridades de los Estados Unidos. Lo calificó de “irresponsable”.
TRAICIÓN
De acuerdo con el portal Nuevo Siglo, el agente del FBI Stephen Marston, quien testificó el pasado martes, explicó al jurado cómo investigó a Rodríguez hasta llegar a la conclusión de que para interceptar el sofisticado sistema de comunicación de el Chapo era necesaria su colaboración.
Fue así como en febrero de 2010, el agente encubierto le tendió una trampa haciéndose pasar por un mafioso ruso que estaba interesado en adquirir un sistema similar y logró reunirse con Rodríguez en un hotel de Manhattan, en Nueva York.
El FBI grabó al ingeniero, que trabajaba desde Colombia, confesando sus servicios y este, al verse descubierto, aceptó colaborar con el Gobierno de los Estados Unidos a cambio de no ir a la cárcel.
De esta manera, la policía federal le pidió a Rodríguez que mudara tres servidores de el Chapo de Canadá a Holanda.
The New York Times señaló que así comenzó una extraordinaria operación clandestina que entre 2011 y 2012 permitió al FBI ingresar a la red encubierta de Guzmán y finalmente obtener hasta 200 llamadas telefónicas digitales en las que conversaba con sus secuaces, con quienes planeaba negocios de droga por varias toneladas, e incluso, mencionaba pagos ilícitos a funcionarios mexicanos.
El diario también citó que trabajar encubierto durante casi dos años, aparentemente, afectó gravemente a Rodríguez, pues la semana pasada los fiscales presentaron una moción que describe cómo un testigo en el caso -probablemente Rodríguezhabía sufrido “un colapso nervioso” en 2013 debido “al estrés” de trabajar para Guzmán.
Estos también refirieron que después de que Rodríguez dejó de trabajar para Guzmán, el Cartel de Sinaloa intentó localizarlo al sospechar que había cooperado con las autoridades.
LAS CONVERSACIONES
Algunas de las conversaciones de el Chapo, interceptadas por el FBI con ayuda del ingeniero caleño fueron escuchadas en la sesión del juicio del pasado martes.
Una de las llamadas reveló una charla a los gritos que el Chapo tuvo con su jefe de seguridad, el Cholo Iván, quien disfrutaba de golpear a policías. Pese a los reclamos de su jefe, este insistía en torturarlos.
En la conversación, el Chapo dice: “No seas tan duro con la policía... No los persigas, son los que ayudan”.