La FIFA propone brazaletes inclusivos
Ante la voluntad de varios equipos del Mundial-2022 de portar un brazalete con bandas coloridas a favor de la inclusión, la FIFA reaccionó ayer sacando su propio brazalete con mensajes para movilizar, un intento de frenar la iniciativa llevada a cabo en especial por Alemania.
La Mannschaft y la selección danesa repitieron a pesar de ello que sus capitanes, Manuel Neuer y Simon Kjaer portarían el brazalete ‘One Love’ que habían previsto llevar, a favor de la inclusión y contra la discriminación, y no el de la FIFA.
Por el momento, de los ocho capitanes de las selecciones en el origen de esta iniciativa solo el francés Hugo Lloris ha anunciado que renunciaba a esta propuesta. El inglés Harry Kane será el primero en mostrarlo sobre un campo del Mundial, mañana.
“El deporte más popular del planeta también puede contribuir a cambiar nuestras sociedades para mejor, transmitiendo mensajes positivos”, escribió la Federación Internacional en un comunicado, proponiendo su propia iniciativa.
En los brazaletes de capitanes prosede puestos por la FIFA a las 32 selecciones aparecerán varios lemas, como “Salvemos el planeta”, “Educación para todos” o “No a la discriminación”.
“Los equipos participantes podrán difundir los mensajes entregados por la FIFA a través de los brazaletes de los capitanes”, eligiendo el lema deseado, precisa el comunicado.
En el escrito, la organización con en Zúrich no se ha pronunciado sobre los brazaletes de colores de la iniciativa ‘One Love’. Las autoridades futbolísticas se han opuesto históricamente a los mensajes políticos en los estadios.
Manuel Neuer, campeón del mundo con Alemania en 2014, dejó claro ayer que llevaría el brazalete ‘One Love’, mientras que su federación dijo estar dispuesta a aceptar cualquier multa.
“Nuestro capitán (Simon Kjaer) llevará el brazalete ‘One Love’. No sé cuáles serán las consecuencias, ya veremos”, dijo por su parte el centrocampista ofensivo de Dinamarca Christian Eriksen.
Desde su designación como organizador del evento en 2010, Catar se ha enfrentado a fuertes críticas, que se han intensificado a medida que se acercaba la celebración del evento, en particular sobre los derechos humanos, incluidos los de las personas LGBTIQ+.
La homosexualidad y las relaciones sexuales fuera del matrimonio están penadas en el pequeño emirato del Golfo.