Tráfico ilegal de fauna silvestre en la provincia de Ocaña
En acciones conjuntas, la Unidad Técnica Ambiental (UTA), Inspección Primera, Espacio Público, Salud Pública y Policía Nacional adelantaron operativos destinados a combatir el tráfico ilegal de fauna en locales comerciales de la plaza de mercado en Ocaña.
“El objetivo primordial es prevenir la venta de especies silvestres, actividad totalmente prohibida según lo establecido en la Ley 2153 del 2021”, indicó el director de la UTA, Adalberto Gerardino Sánchez.
La disposición enfatiza en la necesidad de monitorear y evitar el comercio ilegal de fauna para proteger la biodiversidad.
Durante el operativo, se brindó información detallada a propietarios y administradores sobre las graves consecuencias legales de estas acciones, tanto a nivel municipal como nacional que podrían acarrear sanciones, multas, cierre de los establecimientos comerciales e, incluso, cárcel a los infractores.
Seres sintientes
Las autoridades ambientales recomendaron a la gente denunciar todo acto de maltrato animal, ya que son seres sintientes de acuerdo a las disposiciones del orden nacional.
Los operativos serán frecuentes en los centros comerciales y carreteras para decomisar las especies en vía de extinción.
Por la cercanía con la ribera del río Magdalena en el sur del departamento del Cesar y Bolívar, a Ocaña son llevadas muchas especies exóticas sacadas del hábitat, comercializadas en el mercado negro y sometidas a cautiverio en jaulas y cubiles.
Se han incautado aves silvestres y reptiles, especialmente tortugas, apetecidas por los huevos. Asimismo, micos y los más atrevidos tienen como mascotas serpientes.
“La gente debe entender que esas especies ni se venden, ni se compran, ya que están alterando el régimen
alimenticio y hacen un gran daño al ecosistema. La Policía Ambiental y la Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental, Corponor, hicieron el acompañamiento en los operativos y procedieron a devolver esos animales a su hábitat natural”, dijo el ingeniero Adalberto Gerardino.
Las personas sorprendidas traficando y comercializando animales exóticos se les aplicará un comparendo ambiental, se aplicarán los códigos con multas y sanciones. Si son reincidentes se cierra el establecimiento e, incluso, podrían parar en la cárcel por maltrato.
Corazón animal
La abogada, Nohora Elizabeth Pinto Sánchez, directora de la fundación Corazón Animal indicó que existen las leyes para castigar a los responsables del maltrato, sin embargo, pocas veces se hace efectiva.
Señala algunos lugares donde se mantiene la comercialización de esos animales en precarias condiciones sanitarias y los funcionarios de turno no actúan con severidad.
La Ley 1774 del 6 de enero de 2016 es muy estricta sobre las formas de maltrato animal, ya que son seres sintientes y el Estado los protege e impone multas y sanciones.
Denunció la carencia de un Centro de Bienestar Animal, ya que los mandatarios de turno no prestan atención a esa problemática. Reclamó, además, controles efectivos en los peajes existentes en el sur del departamento del Cesar para evitar la comercialización de las especies.
Indicó que en Ocaña además de vender los famosos periquitos, también se comercializa de manera clandestina la carne de armadillo, guartinaja, asimismo, huevos de tortuga e iguana, sin medir las repercusiones sobre el medio ambiente. “Ellos cumplen una función para mantener un equilibrio en el ecosistema, todo el mundo se queja, pero nadie toma las banderas para defender la fauna y la flora”, agregó.