Anotaciones atinentes a la fecha de fundación de Pamplona
(Fragmento)
“Confieso que me maravillan los frailes cronistas del Nuevo Reino de Granada y los imagino en sus oscuros conventos provistos detintero, pluma de ganso y velas de sebo, escribiendo para legar un testimonio de lo que oyeron, leyeron o vivieron, como periodistas de esa lejana época. En este artículo trascribo sus citas, bregando para no sacrificar la claridad en aras de la brevedad”.
Para aplicar las Nuevas Leyes de 1542 (“por ninguna vía se hagan los indios esclavos”) en el Nuevo Reino y las gobernaciones de Santa Marta, Río de San Juan, Popayán y Guayana llegó a Cartagena de Indias en 1544 el visitador y juez de residencia Miguel Díez de Armendáriz con su joven pariente Pedro de Ursúa quien, como Ortún Velasco, marcharía por los parajes neogranadinos para fundar una villa. En julio de 1549 se estableció una Real Audiencia en Santafé, cuando se planeaba la jornada a “las Sierras Nevadas”, nombre dado a la cordillera oriental de los Andes, explorada por Ambrosio Al nger procedente de Venezuela en 1533 y por Hernán Pérez de Quesada que buscaba El Dorado, en 1541.
LOS CRONISTAS DEL NUEVO REINO DE GRANADA
Respecto a la fundación de Pamplona consulté a cuatro de ellos (recorto el título): Fray Pedro de Aguado (1513-?): Recopilación historial; Fray Pedro Simón (1574-1628): Noticias historiales; el obispo Lucas Fernández de Piedrahita (16241688): Historia general de las conquistas y fray Alonso de Zamora (1675- 1719): Historia de la Provincia de San Antonio. (Citaré la fecha en que fue escrito y/o publicado en Europa porque en Colombia, Simón fue en 1858, Fernández en 1881, Aguado en 1906 y Zamora en ¿1930?).
1583. Aguado, Libro Sexto, dice que en septiembre de 1549 Miguel Díaz (sic) autorizó a Ortún Velasco para poblar en Sierras Nevadas. Éste preparó su gente e inició la jornada, pero por la misma época Pedro de Orsúa no pudo efectuar la suya que era “de entre los dos ríos […] por no tener oro para aviar su gente” y su tío le ofreció que fuera a las mismas sierras “[…] anulando a Ortún Velasco los recados y licencias […]”. Cada uno siguió su ruta y desde Camara (?) Orsúa escribió a Velasco que estaba en Rasgón (hoy Macaravita) pidiéndole que continuara “hasta al valle de Zulia”. (¿Y cómo sabía Ursúa de la existencia del río Zulia? Según Aurelio Ferrero: gracias a Pedro Alonso de los Hoyos, miembro de la expedición, quien “había acompañado a Pérez de Tolosa en la expedición tocuyana de 1547, y había sido por lo tanto de los descubridores del valle de Santiago, de las Lomas del Viento, de los valles de Cúcuta y del río Zulia”). Orsúa llegó al valle del Zulia “[…] cinco días antes de todos Santos habiéndose detenido en el camino dos meses. Velasco llegó dos días después […]” es decir, Orsúa llegó el 27 y Velasco el 29 de octubre, pues el día de todos los Santos se celebra el 1° de noviembre desde el siglo XI. Incidentalmente, relata que los indios salieron con comida y bebida que llevaban “[…] en calabazas de brevaje (sic) o vino el cual hacen de maíz […]” calabazas que los indios llamaban chitareros, de donde “los españoles llamaron a los naturales de estas Provincias chitareros”. “Como Orsúa se viese en el valle de Zulia de buena disposición para asentar en él un pueblo […] puso por nombre la ciudad de Pamplona, por ser él de junto a la de Navarra […]”.
1627. Fray Pedro Simón en la Sexta Noticia: Velasco y Ursúa “[…] salieron de Tunja, entrados algunos meses del año mil quinientos cuarenta y ocho (1548) […] pasado el rio Sogamoso y entrando en la provincia de los Laches y quebradas de Tequia[…] conquistando cada cual por lo que le cupo[…] y se encontraron en la provincia de los Chitareros […] se determinó que en un pequeño valle a quien (sic) llamaron del Espíritu Santo, coronado a la redonda de altas sierras, llano y de buenas aguas […] se poblase una ciudad a quien (sic) llamó la ciudad de Pamplona a devoción de la otra ciudad de Pamplona de Navarra […] Fue esta fundación entrado ya el año de mil quinientos cuarenta y nueve […]”. Discrepa de Aguado en la fecha de salida, introduce el mote “valle del Espíritu Santo” y concuerda con el año de fundación.
1688. Fernández de Piedrahita (Libro XI) es más detallista que los anteriores mas no por ello exacto en cuanto a las fechas. Dice que Ursúa salió de Tunja “por el año de cuarenta y nueve” y transitó hasta el Chicamocha que cruzó usando “maromas y tarabillas […] que lo industriaron los moradores […]” pasando por “[…] los países de Paipas, Duitamas, Cerinzas […] reconocidos los umbrales de la provincia de los Chitareros […] dieron en las de Servitá, Icotá y Cocotá […]. Velasco […] dio con un hermoso llano ceñido de sierras que llamó del Espíritu Santo, por haberlo descubierto la víspera de Pentecostés […]”. Narra que hubo escaramuzas con los indios que fueron fácilmente derrotados y se emprendió una correría que los trajo hasta los valles de Cúcuta y el valle de Santiago “[…] de donde vueltas y juntas en un cuerpo las tropas revolvieron […] a poblar en el llano del Espíritu Santo […]” que les agradó y que servía de centro para gobernar. “[…] Pedro de Ursúa dio principio a la fundación de una villa que llamó Pamplona a contemplación suya y del tío […] en recuerdo de su patria […]”. Concuerda pues con el año y sugiere el mes de la fundación, dado que Pentecostés se celebra 50 días después del domingo de Pascua que cae en mayo o junio.
1701. Zamora, libro tercero, coincide básicamente con Fernández: “[…] Ortún Velasco dio vista al valle que llamaron del Espíritu Santo; por haberlo descubierto en la víspera de su solemnidad […] fundó el capitán Pedro de Ursúa una villa que llamó Pamplona, en obsequio de su Patria […] se tomó posesión por el mes de Mayo (sic) de 1549 […]”. Vale la pena anotar el concepto de Zamora sobre los indígenas: “[…] Su ignorancia era tan grande
en todas las costumbres morales que no se les halló que adoraran cosa alguna. Su Dios era el vientre; todos vivían como las bestias, sin acordarse de que habían de morir y muriendo sin demostraciones de otra vida. Tenían el error de que es mortal el alma […]”. (Hoy, en vez de ignorantes los llamaríamos seguidores de la filosofía materialista).
Los primeros historiadores
1848 -1850. Joaquín Acosta (18001852) en Compendio histórico del descubrimiento y José A. de Plaza (1807-1854) en Memorias para la historia de la Nueva Granada: coinciden en el “valle del Espíritu Santo” y discrepan un tantico en la fecha de fundación: “abril de 1549” dice aquel; “principios de 1549” dice este.
Los historiadores regionaLes
1911 J.E. Rocheraux (1880-1967), eudista francés en Pamplona: “la víspera del día de Pentecostés […] llamaron del Espíritu Santo” sin precisar fechas.
1930. Caracciolo Parra León (1901-1939) historiador venezolano nacido en Pamplona (hijo de exiliados venezolanos) y fray Andrés Mesanza (1879-1959), glosan a Zamora y con base en la Recopilación historial y en manuscritos obtenidos en la Academia Venezolana de Historia afirman: “El relato (sic) de Simón y el de Piedrahita, generalmente aceptado, quedan convencidos de falsedad; en efecto, la expedición no salió de Tunja ni en 1548, ni a principios de 1549, ni el valle donde se fundó la ciudad fue descubierto la víspera de Pentecostés. […] Pamplona debió ser fundada en los últimos días de octubre o muy a principios de noviembre de 1549; quizás, más bien, el 30 o 31 de octubre. […]”. (La versión de Aguado, las probanzas de servicios de Ortún Velasco y el buen criterio de Parra y Mesanza se conjugaron para elaborar esta atinada hipótesis). “[…] Después de fundada se emprendió la pacificación de las tierras comarcanas […] Orsúa al poco tiempo se marchó […] en cambio, el capitán Velasco permaneció en la ciudad, la sustentó, la sirvió y se hizo en ella por mil títulos benemérito, ora en los tiempos de riqueza y auge, ya en las épocas de decadencia y pobreza: de modo que hasta por este respecto le debe mucho más la ciudad a D. Ortún que a D. Pedro […]”.
1932. Belisario Matos Hurtado (1890-1953) en Boletín de Historia y Antigüedades (1932): “Cinco años habían transcurrido desde el memorable 1° de Noviembre (sic) de 1549, día en que los aguerridos capitanes Orsúa y Velásquez de Velasco fundaran, en tierras de los chitareros, y en el risueño valle del Zulia, la ciudad de Nueva Pamplona […]”. (Ninguno de los cronistas habla de “Nueva Pamplona” y los pamploneses no somos neopamploneses). Alberto Peralta C. en La ciudad de Ursúa. Monografía de Pamplona escribe: “Fundación de la ciudad. (1° de noviembre de 1549)”. Y citando a Henao y Arrubla se contradice: “Pamplona […] fue fundada en abril de 1549”. Sin embargo, estos en su Historia de Colombia (1936) dicen: “Pamplona […] fundada, probablemente, a fines de 1549 […]”.
1950. Luis E. Páez Courvel (19061950) en Estudios históricos sobre Pamplona y Ocaña da crédito a Matos Hurtado quien «basado en las instrucciones dadas por el cabildo pamplonés al Procurador General de Nuevo Reino de Granada […] de 25 de abril de 1557[…] la cláusula XI […] dice: “[…] conceder en esta ciudad indulgencia plenaria […] a todos los que […] dieren una limosna […] el día de Todos los Santos […] atento a que en aquel día se pobló esta ciudad …”».
1960. Aurelio Ferrero Tamayo (1918- 2004), tachirense en Juan Maldonado y Ordóñez fundador de San Cristóbal dedica páginas a la jornada de Pamplona: “[…] finalmente el día de todos los santos de 1549 fundaron a Pamplona […]”. Su fuente es “el erudito historiador Páez Courvel”.
1992. José de J. Rico Villamizar (1910-?). Historiador silero, en América, dolor inédito habla de los “interrogantes calendáricos (sic) de la Fundación”, comenta sobre las contradicciones con respecto a la fecha del 1° de noviembre, la pérdida de actas del cabildo pamplonés, reconoce su fallido intento “a la zaga de tan preciosa información” y a la postre sostiene: “[…] la fecha Primero de Noviembre, (sic) reconocida como anomástica (sic) de la ciudad de Pamplona es la verdadera, no obstante la ausencia de un documento que la certifique […]”.
La certificación
El historiador pamplonés Silvano Pabón Villamizar en Historia del poblamiento y construcción del espacio hispánico en Pamplona: «[…] el proyecto de “Sierras Nevadas” empezó a mediados de 1549 […] los dos capitanes y sus soldados recorrieron la tierra “apuntando” algunos grupos nativos, mientras decidieron poblar la hueste “por el día de todos Santos”. Hubieron de pasar 381 años para proponer la fecha de fundación (Parra León y Mesanza) y 66 años más para una prueba reina (Pabón) con el testimonio de Alonso Rodríguez que Pamplona del Nuevo Reino de Granada se fundó “el día de Todos los Santos”, martes 1° de noviembre de 1549.