Mercedes Ábrego, independiente y altiva
Madre de tres hijos, cabeza de hogar por viudez, propietaria y administradora de la hacienda “El Urimaco”, bordadora y costurera, la vida de nuestra heroína cambió al encontrarse con Simón Bolívar en los valles del Zulia, procedente de Ocaña; conocedora de sus planes de libertad, le suministró una casaca bordada por ella con hilos de oro, y varios uniformes para los integrantes de su ejército, lucidos por ellos después de la victoria de la Batalla de Cúcuta el 28 de febrero de 1813.
Esta batalla, más que importancia militar, tuvo una significación política de gran trascendencia en la campaña libertadora, pues este triunfo le permitió a Bolívar despejar la ruta que lo llevaría a emprender la Campaña Admirable. Bolívar partió hacia Venezuela el 14 de mayo, dejando al mando al joven militar Francisco de Paula Santander, quien mantuvo el control del valle de Cúcuta y sus alrededores hasta el 18 de octubre del mismo año. Este día ocurrió la fatídica batalla del Llano de Carrillo en la que las huestes libertadoras perdieron el control de este territorio a manos de Bartolomé Lizón, capitán de cazadores del Regimiento de Puerto Rico y cuya consecuencia fue la muerte de cientos de patriotas, entre ellas la de Mercedes Ábrego y otras mujeres que colaboraban con la causa Libertadora, como Florentina Salas y Carmen Serrano. Estas mujeres al parecer hacían parte de una red de espías e informantes, cuya participación en la independencia iba más allá de ser la conocida costurera y bordadora, que obsequió una casaca al libertador.
Mercedes Ábrego fue apresada en su hacienda la noche del 20 de octubre y conducida descalza y en piyama, a la cárcel de Cúcuta, situada en la avenida 5ª con calle 11. En la tarde del día siguiente, una vez recibido el sacramento de la confesión y ser desnudada, fue degollada por Ignacio Salas; nunca se supo que pasó con sus restos mortales.
Su familia afirma que ella pagó con su vida por presentar a Bolívar con un buen uniforme. Ella fue sin protestar, y dio la bendición a sus perturbados hijos. La ejecución tuvo lugar en frente de sus hijos.