Saquen la agenda y anoten con cuidado
La actual emergencia de salud y económica está dejando sobre la mesa una serie de temas estructurales de la sociedad colombiana que tendremos que repensar. ¿ Qué es lo bueno de esta oportunidad? Que, como dicen muchos de los filósofos y pensadores que analizan la situación, podremos pensar de una manera mucho más libre, porque la pandemia nos ha demostrado que muchos “inamovibles”, muchos puntos “fijos y no negociables”, sí son movibles, no nos tan fijos, y evidentemente negociables. Así, sí se puede pensar “fuera de la caja”.
Los temas son muy grandes y debemos sacar la agenda para no perderlos de vista. Comienzo con uno que es vital, es el nuevo puesto, el rol de la ciencia en la toma de las decisiones en el país. No se trata de desplazar la política y la ética, sino de darle un buen insumo a ellas para toma de decisiones. Los científicos deben ser reconocidos y su palabra bien tenida en cuenta. Los datos duros, las tendencias, los modelos, etc nos deben dar la mejor información disponible para la toma de decisiones.
El cambio climático, el cuidado de la naturaleza, la ecología integral, lo debemos colocar como prioridad, es la condición que nos va a permitir ser sostenibles en el tiempo. El tema es central, y pasará por el desarrollo de medios de transporte sostenible, por ejemplo, las bicicletas. Por los programas de reforestación. Por el aumento de la tasa de reducción de consumos, reciclaje, reutilización.
La equidad social, una sociedad es inviable con tantas y tan graves desigualdades. Que haya tantas personas en condiciones por debajo de la línea de la pobreza y tantos en condiciones de vulnerabilidad, que ante cualquier problema caen en la pobreza, fractura una sociedad. Se requiere de un sistema social equitativo para que exista la cohesión social básica. La pandemia nos ha recordado que todos somos iguales. Pensión universal e ingreso mínimo formalizado. Nadie debe quedar en los márgenes excluido. Es la invitación de los Objetivos de Sostenibilidad de la ONU que dice: “Que nadie se quede atrás”.
La importancia de defender la democracia, que tiene muchos problemas, que en el país todavía hay severas imperfecciones y vicios que la desdibujan, es verdad. Pero es el sistema que hemos optado y en los cuales hemos hecho en occidente una tradición. Por ello, actitudes autoritarias, algunas de ellas excusadas en la pandemia, deben prender las alarmas. También los procesos de seguimiento de datos tan efectivos para los cercos epidemiológicos deben servir para ello y no para la manipulación ni la intimidación política. Y finalmente, los golpes sociales y económicos pueden dejar a la democracia en vulnerabilidad de los populismos de izquierda y derecha (¡ ambos!), por lo que es fundamental la presencia de medios de comunicación serios, libres y responsables. No podemos quedar al garete, en las garras de los Likes… o de las cadenas de WhatsApp … o peor en las manipulaciones de unos hackers apoyados en machine learning.
Estos son los temas de fondo y estructurales que no podemos dejar de lado. La pandemia nos los ha puesto otra vez en primer lugar de la agenda: Democracia, equidad, ecología integral. Hay que repensar los acuerdos sociales para poder dar un camino verdaderamente sostenible y humano para nuestro futuro.
Los científicos deben ser reconocidos y su palabra bien tenida en cuenta.