Con mayor impacto
El costo de vida en Colombia se mantuvo al alza, hecho que lleva a pensar a analistas que la tendencia se mantendrá en lo corrido del año.
Según el reporte del Departamento Administrativo Nacional de Estadística ( DANE), aunque la variación del Índice de Precios al Consumidor ( IPC) en junio fue negativa (- 0,05%), tanto en lo corrido del año como en la variación anual las tasas siguen siendo mayores a las del 2020.
En los primeros seis meses esta tendencia fue del 3,13%, frente al 1,12% de los primeros meses del año pasado, y en el pronedio del último año ya ascendió al 3,63%, contra el 2,19% a junio del 2020.
En la capital caldense el Índice de Precios al Consumidor se ubicó en el 3,39% en los primeros seis meses del año, la sexta inflación más baja del país. El mayor efecto también se debió al aumento de alimentos y bebidas no alcohólicas ( 9,79%), educación ( 5,21%) y hoteles y restaurantes ( 4,07%).
Todo el año
Esto evidencia una tendencia que, según los analistas consultados por el Banco de la República, estaría entre el 2,95% y el 4,10% para el año completo. La explicación se centra en que, si bien ya se levantaron los bloqueos, que llevaron a un desabastecimiento en el país, el incremento de los alimentos se mantiene.
En junio del 2021 en comparación con mayo del mismo año, la variación de las subclases que más aportaron al índice total fueron carne de aves ( 4,93%), huevos ( 7,77%), carne de res y derivados ( 2,43%), comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio ( 0,74%), aceites comestibles ( 6,01%), azúcar y otros endulzantes ( 9,71%), vehículo particular nuevo o usado ( 0,61%), comidas preparadas fuera del hogar para consumo inmediato ( 0,61%), leche ( 0,78%) y legumbres secas ( 3,14%).
El director del DANE, Juan Daniel Oviedo, explicó que esto se debe a las presiones inflacionarias en proteínas, caso el pollo y el huevo, que según advirtió la Federación Nacional de Avicultores continuarán altos en los últimos meses.
El comportamiento año corrido del IPC se explicó principalmente por la variación año corrido de las divisiones alimentos y bebidas no alcohólicas
y alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles.