“Se tendrá una mayor incidencia social, política y comunitaria de voces de los territorios”.
Mario Hernán López, experto en paces y conflictos
1 En medio de las dificultades políticas que ha tenido en el Gobierno en la implementación de ciertos capítulos y componentes del acuerdo de paz, todavía desde la institucionalidad, en este caso jurídica, se abren paso contenidos que habían quedado en el camino. Con respecto a esas curules puede ocurrir más o menos lo mismo que previo a los acuerdos en el 2016, cuando un sector consideraba que al Gobierno se lo iban a tomar las Farc: la gran propaganda para generar miedo colectivo era la toma inminente del Estado por el comunismo. En el espíritu de estas curules está aumentar el grado de participación. Se tendrá una mayor incidencia social, política y comunitaria de voces de los territorios y activar un mayor diálogo de 2 regiones que han sufrido el conflicto con el Legislativo.
2 Es algo necesario. En la medida en que este país, como se intentó hacer con la Constitución de 1991, y todavía estamos en mora de hacerlo, sea más diverso, más plural en el terreno político, y comprender que hay múltiples visiones de la sociedad y de que podemos convivir en medio de esas diferencias profundas. Si algo le falta avanzar a Colombia para una construcción de diferentes paces en distintos ámbitos es, justamente, poder entender que podemos hablar en medio de esa diversidad.
3 Hoy estamos asistiendo a un momento inédito. Hay sobre la mesa situaciones supremamente desafiantes, complejas, que van desde las implicaciones de la pandemia sobre la economía y la vida social, la profundización de las desigualdades, hasta la movilización social más reciente, que no sabemos aún con exactitud realmente qué fue lo que pasó allí. Aparecieron otros repertorios que tenemos que comprender mucho mejor. En ese marco, la llegada de estas personas al Congreso, probablemente, ayude a comprender al país lo que pasa y a las regiones a participar en las decisiones, particularmente en políticas públicas.