Huracán Michael sigue su camino tras devastar el noroeste de Florida
Aunque anoche fue degradado a tormenta tropical, ya había arrasado grandes territorios en la zona del Golfo de México.
continúa generando fuertes vientos e inundaciones a su paso por Estados Unidos como tormenta tropical, tras dejar al menos seis muertos y un rastro de devastación en el noroeste de Florida, donde tocó tierra como huracán de categoría 4. Según las autoridades, ha sido la tormenta más poderosa en golpear este estado del sureste estadounidense en años. Al menos seis personas murieron por la tormenta, cuatro en Florida, una en la vecina Georgia y otra en Carolina del Norte. El ojo de Michael tocó tierra firme cerca de Mexico Beach, una localidad a unos 30 km al sureste de Panama City, cerca de las 17H00 GMT del miércoles como un huracán de categoría 4 de un máximo de 5 en la escala Saffir-simpson, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC). Degradado a tormenta tropical, Michael atravesaba Carolina del Norte con vientos máximos sostenidos de unos 85 km/h, en dirección hacia el noreste. A su paso producía inundaciones en sectores de Carolina del Norte y de Virginia, así como fuertes vientos también en Carolina del Sur. “Es una devastación impensada", dijo Rick Scott, el gobernador republicano de Florida. "Mi mayor preocupación es, por supuesto, la pérdida de vidas. Sé que varias personas resultaron heridas”, agregó. El gobernador pidió a la población que no saliera: “Hay líneas de electricidad en el suelo y hay árboles caídos por todas partes”. Scott había advertido que el huracán sería "la tormenta más destructiva que
Por la tormenta, se detuvo de forma temporal el 42 % del Golfo y casi un tercio de la producción de gas natural, pero ayer ya se veía algo de reactivación”.
azota esta zona en la costa del Golfo de México. Al informar al presidente Donald Trump, el jefe de la agencia federal de emergencias FEMA, Brock Long, dijo que Michael es el huracán más intenso que azota el área desde 1851. En declaraciones a Fox News el jueves, el mandatario prometió que “la reconstrucción será rápida”. El año pasado, una serie de huracanes catastróficos azotó el Atlántico occidental. Los más arrasadores fueron Harvey en Texas, Irma en el Caribe y Florida, y María. La temporada de huracanes del Atlántico termina el 30 de noviembre.