Un cambio de fórmula

Entre las carteras de Hacienda y Minas impulsarán, a través de un proyecto de ley, una nueva regla para aumentar las regalías que reciben departamentos y municipios productores, y asignarlas, también, a las regiones por los que pasan y se transportan los recursos extraídos.

el paso en el calendario del tercer mes del año trae consigo el segundo periodo de la legislatura 2019-2020, en la que el Gobierno podría tener mayor facilidad de ver resultados en el Congreso. Esto es, proyectos aprobados debido al mayor margen de juego que le han dejado sus últimas movidas de fichas estratégicas en el gabinete y a los acuerdos políticos que, por lo menos el año pasado, le ayudaron a que no se le hundiera la Ley de Crecimiento Económico (o reforma tributaria), en medio de una coyuntura social compleja que atravesaba el país inmerso en marchas de una ciudadanía que exigía mejoras en la educación y salud, entre muchas otras.

Aunque la agenda gubernamental para este año es amplia y contempla importantes proyectos, entre el paquete que el Ministerio de Hacienda, junto a la cartera de Minas –con apoyo de Planeación Nacional–, le presentará al Legislativo en la nueva temporada que inició el pasado 16 de marzo, hay uno que tiene que ver con la reglamentación de la reforma al Sistema General de Regalías (SGR).

Previo a ahondar en el tema, cabe recordar que las regalías son entendidas como la contraprestación económica que recibe el Estado por la explotación de recursos naturales no renovables y que, mediante el SGR, se determina la distribución, objetivos, ejecución, control y uso de este tipo de dineros entre las entidades territoriales y el Gobierno Nacional.

Según explica el viceministro general de Hacienda, Juan Alberto Londoño, con respecto al proyecto de ley del SGR, “ya el Congreso de la República aprobó el acto legislativo que nos permitió modificarlo”. Sobre el espíritu de dicha iniciativa, el funcionario destaca que se busca aumentar los ingresos que reciben los departamentos y municipios productores, así como aquellos por los que pasan y se transportan los recursos extraídos. “Queremos darle más autonomía a los entes territoriales que han mostrado su responsabilidad en el manejo y ejecución de las regalías. Es decir, los proyectos no van a pasar por todos los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (OCAD), como se hace hoy”, agrega.

Los OCAD son encargados de evaluar, viabilizar, aprobar y priorizar los programas y proyectos que serán financiados con recursos del SGR. Este órgano está conformado por el gobierno nacional y los departamentales, y las universidades.

Según la propuesta, y de acuerdo con el Ministerio de Minas, “la asignación de regalías para las regiones productoras aumenta de 11% a 25%, y los municipios con mayores necesidades básicas insatisfechas recibirán más recursos, al pasar de 10,7% a 15% del total de regalías”.

Londoño, por su parte, señala que se introdujo una partida para proyectos regionales, con el espíritu de fortalecer esta figura. “El objetivo es que los gobernadores y alcaldes empiecen a pensar en unos planes que generen sinergias entre ellos, y que se vea un verdadero desarrollo armónico y en línea con las necesidades de sus comunidades. La idea es que arranquemos el próximo bienio ya con estas reglas de juego”, concluye.

Un mejor reparto de los recursos por la extracción