Las nuevas finanzas
La evolución de estos servicios basados en las tecnologías y modelos de innovación digital ha generado un nicho cada vez más fuerte en Colombia. Pero aún debe crecer y garantizar el acceso a más usuarios.
Las fintech son empresas que ofrecen productos y servicios financieros a través de modelos de negocio basados en tecnología e innovación digital, los cuales llevan ya años estando en el punto de mira de los inversionistas. De hecho, el mayor momento en cuanto a su crecimiento mundial fue en el 2016, con una cifra récord de US$20.900 millones en capital, según un informe de Citigroup.
Además, América Latina es un terreno fértil para desarrollar el segmento fintech, debido a la alta penetración de teléfonos celulares y al gran porcentaje de personas no bancarizadas. Según la Asociación Latinoamericana de Capital de Riesgo, el continente atrajo el 40% del total invertido por fondos privados en la región en el primer semestre de ese año.
De acuerdo con apreciaciones de Finovista hechas en el ‘Fintech Radar Colombia’, esa industria se ha duplicado en dos años al lograr un avance del 114%, mientras que en el 2019 nacieron 78 emprendimientos y 22 cesaron operaciones, para un crecimiento neto del 45% en el último ejercicio.
Así las cosas, el país dispone hoy de 180 emprendimientos digitales que le ubican en las posiciones de liderazgo, aunque México y Brasil duplican el ecosistema nacional con 394 y 380, respectivamente. El 14% de las fintetch latinoamericanas son colombianas.
El reporte señala, además, que la tasa de crecimiento nacional de dicha industria es la segunda de la región, y está ubicada después de México, que avanza con un 119%, mientras que Brasil y Argentina solo lo hacen con 65 y 61%, respectivamente.
“En Colombia el ecosistema crece enormemente, porque las empresas avanzan con nuevos productos y están recibiendo la inversión de los fondos de capital privado y, además, hay todo un desarrollo impulsado por el Gobierno a través de la Superfinanciera, que le brinda un apoyo más fuerte. El país genera demanda y adopción de estos servicios a diario y, si bien nos falta mucho, el balance por el momento es positivo y demuestra por qué somos el tercer país de la región con estos nuevos bancos”, explica Edwin Zácipa, cofundador de Colombia Fintech.
En el caso de la adopción de fintech como un porcentaje de la población digitalmente activa en cada mercado, Colombia ocupa el quinto lugar del mundo tras China e India (87%) y Rusia y Sudáfrica (82%), según datos del Fintech Radar Colombia.
“Hemos visto una tendencia creciente en firmas que están desarrollando productos para ser utilizados por las entidades financieras, sobre todo aquellos que les ayudan a hacer más eficientes sus procesos”, explica Eduardo Morelos, director de Investment & Research de Finnovista.
Para los países latinoamericanos, la combinación de altas tasas de exclusión financiera –según una encuesta de Findex, solo 54% de la población adulta en la región tenía acceso a una cuenta bancaria en el 2017– con la penetración de la telefonía móvil –en el 2018, de acuerdo con GSMA, estaba en 68%–, son una gran oportunidad para el sector, pues satisface a la población desatendida de manera tradicional.
Retos y expectativas
Los estímulos para el sector no se han hecho esperar. El decreto 2443 del 2018 despejó el camino para que las entidades financieras inviertan de forma directa en las fintech, lo que le ha dado una mayor diversificación al sistema. Por eso, varios fondos en Colombia apoyan emprendimientos, como por ejemplo Sura Ventures, Rockstart, Inglab, Invictum Capital, Velum Ventures y Torrenegra Labs, entre otros.
“Las principales empresas del ecosistema responden a jugadores ya consolidados como lineru.com o semply.com y, en temas de pagos, como Payu y Mercado Pago. Pero hay unos nuevos muy interesantes como Lulo bank o Dale!, que, de cierto modo, entran al juego a competir y significan más beneficios para el consumidor. Lo importante es poder brindarles a los usuarios una mayor respuesta a sus exigencias y hacerlo con confianza digital”, apunta Zácipa.
Es el caso de las ‘billeteras’ –aliadas de los bancos tradicionales– como Nequi, Daviplata y Dale!, tienen las mayores expectativas de crecimiento este año. Nequi, por ejemplo, ha alcanzado 1,3 millones de usuarios en tres años en el país, mientras que Daviplata tiene más de seis millones de clientes. Dale! se ha marcado como meta vincular a más de 6,3 millones de adultos para que se vinculen al sistema financiero.
Colombia es el tercer país en la región con este tipo de ‘nuevos bancos’. El 14% de las fintech de Latinoamérica tienen sello nacional.