EN SUS PALABRAS
Pintor. “Me encanta pintar, comencé intentando cosas, como spin
art. Hice mi propia galería en internet, pero pensé que además de mostrar lo que hago, lo debería vender. Así que pagué los impuestos y doné mi trabajo. Pintando, haciendo discos y yendo al gimnasio sobreviví por dos años y medio”.
Escenarios. “Empecé a tocar en carpas, pequeños bares, ahora en estadios y foros grandes, pero algo que no cambia es que al sentarme frente a la batería vuelvo a sentir los nervios, la adrenalina y la emoción de la primera vez”.