World Class 2022: una competencia de otro mundo
“ESTE NO ES UN NEGOCIO DE LICORES, ESTE ES UN NEGOCIO DE PERSONAS, DE CREATIVIDAD, DE SER MULTICULTURALES COMO LAS 50 PERSONAS QUE PARTICIPARON EN ESTE WORLD CLASS”
JENNA BA Global New Age Whisky Brand Ambassador de Diageo
Esta semana se disputó en Sídney el Worldclass 2022, la mayor competencia global de coctelería, en donde los más finos licores son llevados a nuevos niveles de sabor e innovación por los mejores bartenders del planeta. Una colombiana fue participante y PUBLIMETRO la acompañó en esta aventura
Un coctel filtrado con electricidad, otro servido mientras el bartender toca la gaita; un martini acompañado por un video en el que los jueces pueden acceder a través de realidad aumentada a los cultivos en la India, de donde se sacaron las hierbas para la infusión que se están tomando, un highball con extracto de carambolo… Si algo caracteriza al World Class, el mundial de coctelería que se disputa cada año en las ciudades más sofisticadas del mundo, es la creatividad que, sumada a una apuesta por la sostenibilidad y la innovación, fueron las claves de la versión que se disputó entre el 11 y el 14 de septiembre en Sídney, Australia.
Dianna Bernal, la primera mujer en ser elegida como la mejor bartender de Colombia, fue nuestra representante entre los 50 mejores artistas de la coctelería en el mundo. Ella y sus 49 rivales debieron superar cuatro retos diferentes para luchar por un cupo en la final, y en cada uno de ellos tenían que buscar el equilibrio de mantener la tradición y el sabor de marcas legendarias como Johnnie Walker, Don Julio, Singleton y Tanqueray, y crear algo que los jueces nunca hubieran visto o probado.
“Este no es un negocio de licores, este es un negocio de personas, de creatividad, de ser multiculturales como las 50 personas que participaron en este World Class, y aportarle algo de tu país, de tu propia historia, a la legendaria historia de estas bebidas”, señala Jenna Ba, Global New Age Whisky Brand Ambassador de Diageo, senegalesa y británica, feminista y activista en una industria antes marcada por los hombres, y quien representa de por sí el concepto de ciudadana del mundo.
Y es que la apuesta por la coctelería en la industria de licores es, en últimas, una apuesta por la integración: “El sabor y la tradición lo son todo en una marca como Black Label, pero las posibilidades infinitas que un coctel con sabores locales acerque a la marca a gente tan diversa y distante es algo que no deja de fascinarme”, dice emocionada Emma Walker, la primera mujer en ocupar el cargo de Master Blender (maestra mezcladora) en los 200 años de historia del whisky Johnnie Walker.
Para ella, una ingeniera química que ahora decide el sabor de una de las marcas más famosas y tradicionales del mundo, fue “absolutamente inspirador” ver las 50 diversas versiones de highball (un coctel clásico compuesto por escocés y un refresco cítrico) que los participantes del mundial hicieron con su whisky.
Por si las dudas, el de Dianna fue con una bebida a base de reducción carambolo, llevando así uno de los sabores de Colombia a la competición.
“Mira, puede que los sabores de cada región sean diferentes, que los paladares se hayan educado de forma distinta, pero si algo tenemos en común en todo el mundo es que nos gusta pasar un buen rato, disfrutar de la vida, de los amigos, de la noche, ¡de algo! Y en últimas, la coctelería es eso un placer para los sentidos, una experiencia de vida”, insiste Ba.
Y no se equivoca. Las puestas en escena de los bartenders en el World Class 2022 son espectaculares y el reto de enfrentar a jurados que van desde los dueños de los mejores bares del mundo a sommeliers, a otros bartenders que tienen el mismo nivel de celebridad de chefs famosos mundialmente, que hacen temblar el pulso de hombres y mujeres que cada noche pueden atender a mil personas en sus barras sin derramar una gota, pero que en este mundial, saben que esa gota los puede descalificar.
Nick Tesar, el campeón de Australia y uno de los finalistas, por ejemplo, quiso hacer un coctel con Singleton, utilizando una raspadora de hielo como las de plaza de pueblo colombiano, pero se le enredó; Miguel Ecuer, el dominicano, entró en crisis al no encontrar el colador para servir su Don Julio; Liisa Lindroos, de Finlandia, aún se lamenta por no haber enfriado lo suficiente sus copas…
Al final, Dianna no logró meterse entre los 10 mejores del mundo, una gesta que solo un colombiano ha conseguido, Juan David Zapata, en el World Class 2018, disputado en Berlín, pero para ella el haber llegado hasta Sídney ya es un hito que le cambiará la vida.
Ser la mejor bartender de Colombia y tener sobre su espalda la firma de World Class, que no solo es un evento, sino que en sí es una plataforma para que la gente se acerque a los mejores licores del mundo, un sello de calidad como ningún otro en esta industria, le abrirá las puertas de los mejores bares y hoteles de Colombia y el mundo, en donde seguirá llevando experiencias y, como bien lo señala Ba, creando una comunidad que disfruta los placeres de esta vida.