JUNIOR VS. DIM: ¡LLEGÓ LA HORA!
Tiburones y Poderosos se miran las caras en el estadio Metropolitano, por la ida de la final de la Liga Águila
El día con el que sueñan 20 equipos del fútbol colombiano por fin llegó. Los dos mohicanos que continúan en batalla son Junior de Barranquilla e Independiente Medellín.
Una final con historia reciente, con el título que quedó en manos de los paisas en 2016. Aquella final tuvo revancha un año más tarde en Copa Colombia, pero el sabor no fue el mismo. Ahora los curramberos tienen la oportunidad del desquite y para ello será vital sacar ventaja como local en el juego de ida.
Será un choque de estilos, pero ambos son amantes del fútbol ofensivo. Por un lado, el Junior barranquillero volvió a depositar su confianza en Julio Comesaña, aquel entrenador que casi siempre se marcha cabizbajo de la Arenosa, pero siempre vuelve para guiar al equipo que aprendió a amar.
Junior, un equipo con esencia costeña
Comesaña entiende como nadie la idiosincracia del jugador caribe y a la afición juniorista. Una fanaticada que valora más el juego vistoso, el buen trato a la pelota y los firuletes, que el triunfo directo y como sea. El futbolista costeño ama acariciar la pelota y no concibe ganar sin estética.
Conocedor de esto, el uruguayo armó un equipo hecho a la medida de la exigencia rojiblanca. De los habituales titulares, nueve son nacidos en la región norte del país, Solo Marlon Piedrahita, lateral derecho; y Sebastián Viera, uruguayo, pero asentado en Barranquilla desde hace mucho tiempo, no son oriundos de la Costa.
Entre los destacados jugadores costeños sobresalen el lateral izquierdo Gabriel Fuentes, los volantes Víctor Cantillo, James Sánchez, Jarlan Barrera y Luis Díaz. Todos ellos guiados por la experiencia de los veteranos Teófilo Gutiérrez y Rafael Pérez, baluartes de un equipo con mucho sentido de pertenencia.
Pese a eso, la gente no acompañó al Junior en forma masiva en lo que va del semestre. El Metropolitano no vio un partido a gradas llenas en liga ni en Copa Sudamericana, donde los barranquilleros también fueron protagonistas en el semestre.
Ahora, Comesaña y sus jugadores piden el apoyo de la afición rojiblanca, que sueña con la octava estrella. En todo caso, el partido decisivo se sostendrá en el estadio Atanasio Girardot, pero lo que suceda en Barranquilla determinará mucho la vuelta.
El DIM, confiado en un ataque más poderoso que nunca
La fortaleza del Independiente Medellín está en su ataque. No fue la mejor de las campañas del Equipo del Pueblo, pero su ataque siempre estuvo a la altura, siendo un conjunto que no necesita jugar bien para anotar goles.
Pasó en la ida contra Deportes Tolima, cuando superados en el juego, igual se las ingeniaron para anotar dos goles e ir con aspiraciones a Ibagué. No es gratuito que Germán Ezequiel Cano tenga 18 goles en el campeonato, a solo uno de igualar el récord que ostenta Miguel Ángel Borja en torneos cortos.
Junto al argentino, Juan Fernando Caicedo, Andrés Ricaurte y Bryan Castrillón componen un ataque de fábula, que pretenden darle la séptima estrella al DIM, el segundo mejor equipo en la reclasificación del fútbol profesional colombiano.