Jalisco, el nuevo paraíso para producir amapola
México está sufriendo un alza en la producción de estupefacientes; el incremento de la demanda de heroína en Estados Unidos ha hecho que los carteles de la droga impulsen la producción, priorizándola en algunas regiones incluso sobre la siembra de marihuana
La producción de marihuana y drogas sintéticas era el principal dolor de cabeza para las autoridades del estado de Jalisco, en México, en materia de combate a las drogas. Sin embargo, en los últimos años se ha detectado un problema en crecimiento: la expansión en la producción de amapola.
Según datos de autoridades federales y de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), de 2010 a la fecha Jalisco pasó de ser el décimo productor a nivel nacional de esta planta al sexto lugar.
Informes del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia (Cenapi), adscrito a la Procuraduría General de la República (PGR), mencionan que en 2010 se habían efectuado aseguramientos de amapola en solo tres municipios del estado, incidentes concentrados en la zona norte y centro de Jalisco. Para 2018 son 31 los municipios donde se localizaron plantíos, expandiéndose a las regiones costa (norte y sur), valles (sur) e incluso a dos municipios de Los Altos.
Guerrero permanece como el estado con mayor producción de opiáceos en México, seguido de Chihuahua, Sinaloa, Durango, Oaxaca y Jalisco.
“Si aumenta la demanda de heroína en Estados Unidos, da por hecho que habrá un incremento en la producción de amapola en México y es clara la tendencia al alza que se ha visto en los últimos años. El segundo aspecto que se debe analizar es que la siembra de amapola es mucho más redituable que la de marihuana y de menor riesgo que la producción de drogas sintéticas, otro aspecto en el que destacaba Jalisco. Era cuestión de tiempo para que los carteles enfocaran sus baterías en la producción de opiáceos”, señaló Luis Razo, especialista en temas de seguridad.
El experto, quien ha colaborado con académicos e investigadores en Estados Unidos, mencionó que a nivel estatal mucha producción de amapola está financiada por el cartel de Jalisco Nueva Generación.
“Jalisco históricamente ha sido tierra productora de amapola. En los años setenta, Jalisco era de los focos rojos a nivel nacional, pero al finalizar la década y con la intromisión de autoridades de Estados Unidos en México hubo una reducción considerable, en gran parte con la aplicación del Operativo Cóndor en el gobierno de Luis Echeverría”, agregó.
El crecimiento de la producción de amapola en Jalisco va de la mano con la tendencia nacional. Según reportes del Ejército mexicano, en el sexenio de Enrique Peña Nieto se han destruido 105.000 hectáreas de amapola en todo el país, un aumento de 22% comparado con lo asegurado en la administración de Felipe Calderón Hinojosa.