“HEMOS CUMPLIDO”: GERENTE DE PROMOAMBIENTAL
El gerente de Promoambiental habló con PUBLIMETRO sobre la crisis de las basuras en Bogotá y aseguró que ellos han cumplido con las rutas establecidas para la recolección, pero que hay usuarios indisciplinados
¿Por qué hubo tanta confusión con los horarios de recolección al inicio de la implementación del nuevo esquema de aseo, si la Uaesp dijo que había que hacer pedagogía antes de entrar en funcionamiento? Lo primero es que cualquier cambio, sea el que sea, nos va a generar algún tipo de traumatismo. Lo segundo es que sí hicimos labor pedagógica: volanteo, perifoneo, incluso creamos en ciertas zonas algunos cuadrantes para informar a la gente. Se sacaron publicaciones en diarios de amplia circulación y de acuerdo con los sitios, hasta cuñas radiales se sacaron.
Entonces, labor pedagógica sí hubo. Reitero que cualquier cambio trae sus consecuencias, pero desafortunadamente el problema no vino del cambio que realizamos, sino de lo que pasó días antes.
Somos el operador que más zonas de Aguas Bogotá recibió. Cuando sale a la luz que Aguas no pudo participar en la licitación, pues algunos funcionarios se empezaron a salir, entonces los camiones empezaron a quedarse sin gente y eso de por sí ya genera un cambio. Después de eso, Aguas intentó sostener y nos solicitaron, el primero de febrero, que los ayudáramos con unas rutas circulares en vías principales en las zonas donde íbamos a atender.
En este modelo existen dos tipos de usuarios: el disciplinado y el indisciplinado. Ese indisciplinado ve carros circulando a toda hora y asimila que pasan diario, y en ese momento estábamos en proceso de inducción, de reconocimiento, de acoplamiento de flota, y pasábamos día y noche, pues ellos sacaban la basura a todas horas.
Sin embargo, la crisis se inició mucho antes de que ustedes llegaran, ¿tuvieron en cuenta un plan de contingencia?
Sí hubo un plan de contingencia del Distrito, y nosotros, como nuevos operadores, ayudamos. Incluso trajeron vehículos de Cundinamarca para eso.
¿De qué les ha servido ponerles a las bolsas la calcomanía ‘fuera de horario’ si finalmente el usuario la deja en la calle?
Esa es una dinámica que acuñamos, es muy nuestra y en otras ciudades la hemos utilizado. Cuando la frecuencia
del horario se ajusta, la calcomanía hace parte de esa pedagogía y es con toda la intención de decirle al usuario que tiene un horario y que lo tiene que respetar.
El grueso de la comunidad es consciente y sabe que existe un modelo integral de aseo en Bogotá, pero hay usuarios infractores. Con el infractor pasa que la calcomanía sirve como una sanción moral, pedagógica, porque nuestros operadores le ponen el ‘fuera de horario’ y la idea es que se sensibilicen frente al servicio. El deber de los usuarios es exhibir las bolsas dentro del horario, así como nuestro deber es el de recolectar.
La semana pasada se presentaron protestas en San Cristóbal Sur por la acumulación de basuras, ¿cuál fue su plan de contingencia en esa zona?
Hemos mantenido contacto con líderes comunitarios y ediles, y la labor pedagógica en esa zona es distinta porque hay que trabajar muy de cerca con las personas.
En San Cristóbal lo que ocurrió la semana pasada fue que nos avisaron que se iban a tomar todo a las 3:40 p.m. y ahí les dijimos que nos faltaban aún dos rutas por salir, que en dónde estaba el problema. Ellos nos respondieron que nos habían enviado una relación de los puntos críticos, y les dijimos, y quiero dejar claro, que hemos cumplido con las rutas y cuando los usuarios infractores sacan en cualquier momento la basura, pues esa esquina se nos convierte en un punto crítico.
De hecho, cuando nos enviaron el reporte, el viernes en la noche atendimos 40 de los 44 puntos críticos, y al otro día había puntos de acumulación por los usuarios infractores. Tenemos tres grandes frentes: recolección, barrido y gestión social, y ese de gestión social es diario, le decimos al usuario: “Cúmplame que se le va a ver más bonito todo”. Es que no se pueden camuflar en la crisis, porque esa es la cultura del atajo. Si como usuario saco la basura en el horario que es, no habrá problema.
¿Han traído camiones de Cali para ayudar con la recolección?
Sí, hemos traído camiones de Cali. Allá iniciamos la operación en 2009 y cuando llegamos a 2016, la Administración Municipal tomó la decisión de prorrogar la licitación y dieron un periodo de transición para cambiar el equipo de compactación.
Lo que hacíamos era ir metiendo equipo nuevo y sacando equipo viejo, entonces allá teníamos los vehículos del arranque modelos 2009, 2010 y 2011, y cuando se dio lo de Bogotá hicimos algo que se conoce como un overhaul y trajimos 17 camiones compactadores de Cali porque allá cuentan con su flota nueva, Euro V y otras características. Además, en el contrato dice que podemos usar flota de segunda máximo modelo 2002. ¿Por qué dan ese lapso?, porque la ciudad que más consume es Bogotá.
¿Cuántas personas de Aguas Bogotá están trabajando con ustedes?
Están vinculadas 372 personas.
¿Cómo involucraron a los recicladores?, ¿cómo es el trabajo?
Lo primero que hay que dejar claro es que ninguno de los prestadores de servicio de aseo reciclamos. La segunda es que existe una directriz de la Administración Distrital que se especifica en el contrato y que dice que nosotros somos apoyo al proceso de reciclaje.
El primer apoyo es un mensaje que nos pide el Distrito que pintemos en los camiones que dice: ‘Reciclemos. Bolsa blanca’. Todos los vehículos compactadores de todos los operadores deben tener ese mensaje. Nosotros trabajamos con la comunidad y les damos charlas a los usuarios de cómo deben manejar adecuadamente los residuos y de las tres ‘R’, esa es nuestra parte.
La Personería de Bogotá denunció que aún hay unas 9000 toneladas de residuos mixtos sin recoger, ¿ustedes están apoyando con esa recolección?, ¿quedó establecido en el contrato?
En 2015, salió el decreto 1077, en el que quedaron establecidas las normas del cumplimiento de ese marco y hay temas como este que son competencia de cada ciudad, que tienen que ver con los puntos de arrojo clandestino. Eso no es solo para Bogotá, es para todo el país, porque son las administraciones locales las que tienen que acoger y adecuar sus modelos para que los sitios de arrojo clandestino empiecen a ser cobrados.
La norma le dice al gobernante que eso es problema de él, es un problema de vigilancia y control. Ahí tienen dos caminos y uno es el de sancionar y ejercer control, o pagarle a los prestadores de aseo. Como la licitación se dio en este momento, básicamente la Administración dijo: “Como la ley los excluye a ustedes de esta competencia, lo vamos excluir dentro del contrato y eso pasa a llamarse las obligaciones de hacer”. De esa forma, en este momento, estamos apoyando con la recolección de residuos mixtos.
“Estamos pasando los documentos y pruebas necesarias para que la Uaesp tome una decisión de la que seremos muy respetuosos”
¿En qué va la sanción que anunció la Uaesp?
En este momento no tenemos sanción. La interventoría recomendó realizar un proceso sancionatorio que está cumpliendo su curso normal y estamos en el proceso de validación. Estamos pasando los documentos y pruebas necesarias para que la Uaesp tome una decisión de la que seremos muy respetuosos.