Las cumbres de la COP parecieran tener una maldición
Medioambiente. La COP 26 programada para noviembre, en Glasgow, Escocia, se pospuso hasta 2021 debido a la pandemia. Y no es la primera vez que el evento sufre cambios
La conferencia de la ONU sobre el cambio climático de este año ha sido pospuesta varias veces. Ahora tendrá lugar oficialmente del 1.º al 12 de noviembre de 2021 en Glasgow, Escocia. Originalmente, la cumbre estaba programada para noviembre de 2020 y luego se aplazó para principios de 2021, debido a la emergencia sanitaria mundial.
Esto sucede después de que la COP25 también sufrió cambios drásticos. Abandonada por Brasil, se trasladó a Chile. Y luego tuvo que encontrar un lugar en Madrid, España, debido a las protestas en el país latinoamericano.
“Una Conferencia de las Partes (COP) es una reunión crucial de los países y otras partes interesadas para abordar el cambio climático y 2020 es el primer año en la historia de las negociaciones internacionales sobre el cambio climático que comenzaron en 1995 sin una COP”, explicó a PUBLIMETRO Francesco Sindico, codirector del Centro de Derecho y Gobernanza Ambiental de Strathclyde, Universidad de Strathclyde, en Glasgow, Escocia. “El enfoque global sobre el cambio climático puede perderse por otros asuntos también de actualidad que están ocurriendo a nuestro alrededor”, agregó.
Según Sindico, los problemas a los que se enfrentó la COP25 y ahora la COP26 han sido circunstanciales y no están relacionados con la organización de la misma conferencia: “No existe tal maldición en mi opinión. Chile decidió no ser anfitrión de la COP por razones políticas y de seguridad. La COP 26 se está retrasando debido a una pandemia mundial. Ninguna de las dos pudo ser prevista y no debemos leer demasiado en ella”.
De hecho, se espera que el brote de COVID-19 se convierta en un gran debate en la COP 26.
“Para algunos países, COVID-19 será una oportunidad para impulsar una recuperación económica que se alinee con una mayor protección del medioambiente y una mayor ambición climática. Para otros países, será una excusa para flexibilizar las normas ambientales a fin de volver más rápidamente a la normalidad. La COP26 será un campo de batalla entre estos dos enfoques”, añadió.
El experto cree que la larga espera de un año y medio servirá para preparar mejor la organización de la próxima COP.
“Con la COVID-19 puede ser necesario hacer una observación adicional. Las COP sobre el clima son lugares muy concurridos, con miles de personas reunidas muy juntas. Muchos de los asistentes volarán desde distintos países para estar en Glasgow solo por una, tal vez dos semanas. Dependiendo de cómo reaccionen los países y, lo que es más importante, el mundo a la COVID-19 durante el próximo año, podemos ser testigos de una COP climática muy diferente, potencialmente con menos personas y menos atención mediática en directo. Pero esto no significa que será menos importante, sino todo lo contrario”, concluyó Sindico.