Volver o no volver, ese es el dilema de hoy en la NBA
Unos dicen que no volverán a un sistema racista, pero otros quieren jugar.
“NO SOLO NOS CALLAREMOS Y JUGAREMOS PARA DISTRAERNOS DENTRO DE ESTE SISTEMA DE ABUSOS”
CARTA DE UN GRUPO DE JUGADORES DE LA NBA
Showtime es la palabra con la que comienza el espectáculo de la NBA. Sin embargo, en un momento en el que la atención estadounidense es atraída por el coronavirus y por la protesta racial, el regreso del mejor baloncesto del mundo cae incómodo para algunos. Lo sorprendente es que quienes le dicen ‘no’ a que rebote la pelota naranja son las mismas estrellas del espectáculo.
¿Disneylandia?
Una industria tan sólida como la NBA no suele permitir que prosperen estas revueltas. Sin embargo, en esta ocasión el propósito es mayor. Los líderes de la protesta, siendo Kyrie Irving de los Nets de Brooklyn la cabeza visible, creen que jugar en estos momentos sería una distracción para la lucha en las calles que busca la igualdad racial en el país norteamericano.
“No se trata de jugadores individuales, atletas o artistas. Se trata de un grupo de hombres y mujeres fuertes que se unen para el cambio. No solo nos callaremos y jugaremos para distraernos dentro de este sistema de abusos”, recita la carta de la rebelión comandada por Irving, mandada a comienzo de la semana.
Además de Irving, Dwight Howard (Lakers) es otra de las grandes figuras que se unieron para boicotear el regreso de la NBA, pactado para el 30 de julio.
All Star Game
Si la rebelión tiene a sus grandes figuras, el quinteto que defiende la vuelta del básquet no se queda atrás. En las últimas horas, LeBron James alzó la voz a favor del regreso, más allá de que también apoya a las protestas raciales, The King cree que parar la maquinaria no es el camino.
“¿Cuánto tiempo vamos a necesitar? No lo sabemos, pero sentimos que se nos escucha. Es el momento para que finalmente marquemos la diferencia”, declaró James a The New York Times, anunciando que va a jugar.
Ed Davis, pívot del Jazz de Utah, salió a responderle a Irving y compañía. “Es fácil para Kyrie decir que lo donará todo para la reforma social, ¿pero realmente lo haría? Hay otros jugadores que necesitan este dinero para mantener a sus familias y cosas así”, señaló.
Decisión salomónica
En medio de este embrollo, el comisionado Adam Silver manifestó que los jugadores que no quieran viajar a Orlando por miedo al coronavirus, podrán quedarse en sus casas sin ninguna represalia. De quienes apoyan las protestas raciales, el directivo dijo que seguirán en conversaciones con el gremio de jugadores, esperando llegar a un acuerdo, que de llegar, será sobre la chicharra.