Congreso peruano debatirá proceso para destituir al presidente Vizcarra
Esta es la segunda vez en más de un mes que el primer mandatario afronta una situación de este estilo
El Congreso peruano debatirá hoy si admite a trámite la apertura de un nuevo proceso de destitución contra el presidente Martín Vizcarra por permanente incapacidad moral, la segunda vez en poco más de mes en la que el mandatario afronta una situación similar a pedido del legislativo.
Así lo anunciaron las autoridades del Congreso, en donde se convocó a la Junta de Portavoces para que esta, a su vez, decida si llama a un pleno que permitirá cumplir con el primer paso legal para una eventual destitución del mandatario.
Si la junta convoca al pleno, lo que se da por hecho, los legisladores votarán si aceptan debatir la moción presentada el martes por 27 congresistas (uno más que el mínimo legal exigido) para declarar la incapacidad moral del mandatario y la consecuente vacancia de la presidencia, que sería asumida por el presidente del Congreso, Manuel Merino.
Pasos legales
Para proseguir su trámite, el pedido de destitución debe ser apoyado, al menos, por 54 diputados, lo que daría pie antes de 10 días a una nueva sesión plenaria en la que el mandatario o su abogado tendrán que exponer su defensa.
La destitución será una realidad si en la votación posterior del pleno el pedido de vacancia alcanza un mínimo de 87 votos.
Ninguno de estos extremos parece posible por ahora, pues varios grupos en el Congreso ya expresaron su intención de no acompañar la iniciativa e indicaron que solo favorecen que se investigue a Vizcarra, pero no destituirlo cuando el país afronta la grave crisis sanitaria y económica generada por la pandemia de la COVID-19.
Inoportuno
“Mientras avanzamos en un trabajo intenso, llevando progreso y desarrollo a todo el Perú; en ese contexto nos llega un oficio del señor presidente del Congreso, Manuel Merino, donde me da a conocer el pedido de vacancia de la presidencia de la República. El mes pasado me llegó un documento igual”, se lamentó el presidente durante una comparecencia tras concluir el consejo de ministros.
Vizcarra reaccionó así ante un pedido que era esperado por todos desde que el pasado fin de semana se conoció que varios aspirantes a colaboradores eficaces de la justicia afirmaran que el mandatario recibió pagos millonarios a cambio de conceder obras públicas cuando era gobernador de la región de Moquegua (2011-2016).
Esos testigos acusan a Vizcarra por dos casos distintos, vinculados a la trama del denominado ‘club de la construcción’, la supuesta asociación ilícita de varias empresas de infraestructuras peruanas y extranjeras para repartirse licitaciones públicas a cambio del pago de sobornos.
En este marco, la Fiscalía anunció el lunes la apertura de una investigación preliminar contra Vizcarra como sospechoso de haber cometido delitos de colusión y asociación ilícita.
El mandatario se unió a todos sus antecesores en el cargo acusados, detenidos o bajo investigación formal por delitos de corrupción: Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018), Ollanta Humala (2011-2016), Alejandro Toledo (2000-2006), Alberto Fujimori (1990-2000) y Alan García (1985-1990 y 2006-2011), quien se suicidó mientras era investigado por recibir millonarios sobornos.