Bienvenidos a la versión 2021 de Colombiamoda
¿Cómo volver a hacer una feria de moda presencial en un año tan convulso?
Hablamos con Sebastián Diez, director de Marketing de Inexmoda, para que nos contara sobre este reto de hacer una feria de moda en medio de una pandemia.
Si hablamos del país en el primer semestre, las cifras en cuanto a covid y economía no han sido muy alentadoras. Si bien el país ya superó las 20 millones de dosis aplicadas, para el mes pasado se rompió el récord de muertes diarias, con casi 600 muertos al día. Ahora bien, el paro nacional, con sus episodios de violencia estatal contra civiles y bloqueos que duraron casi dos meses, también afectó en gran medida la parte económica: a comienzos del mes pasado, una encuesta de la Andi revelaba que el 84% de sus empresas afiliadas había sido afectada por los bloqueos.
Y si bien durante este primer semestre del año –como informa la firma Raddar– se acumularon gastos por 385 billones de pesos (creció 4,47%), la industria de la moda en Colombia busca maneras de reactivación. Por esta razón, luego de tener la versión Colombiatex en digital, Inexmoda decidió fusionarla con su evento central y uno de los más importantes en Latinoamérica: Colombiamoda, que maneja su formato tradicional con la hibridación digital que mostraron el año pasado. ¿Pero por qué hacer una feria en estas condiciones?
PUBLIMETRO habló con Sebastián Diez, director de Marketing de Inexmoda, sobre el contexto de la feria en un año tan particular.
¿Por qué volver al formato presencial aun cuando no hemos superado la pandemia?
Nosotros desde Colombiatex 2021 hemos venido con la intención de volver a los eventos presenciales. ¿Por qué esa intención? Porque veíamos las estadísticas en términos de compradores y la tendencia muestra que estos necesitan volver a la presencialidad por el hecho de sentir, tocar el producto y su caída, entre otros. Y si bien lo digital juega un papel distinto, alarga el ciclo de moda en este tipo de negocios. Ahora, luego de aplazar, hicimos un focus group con varios empresarios, diseñadores, compañías y emprendedores, para entender qué estaba pasando y aun con el contexto, materializamos el hecho de que fuera presencial de nuevo.
El panorama del país ha cambiado bastante desde el último Colombiatex...
Este año ha sido de muchos contrastes, porque ha sido de muchas variaciones macroeconómicas. La primera variable que tuvimos fue la pandemia. Mientras hubo un cierre parcial en el primer trimestre, fue también uno muy positivo de venta en los últimos cuarenta años. Pero también hay un desabastecimiento fuerte, porque la industria no esperaba un repunte luego de un desacelere tan grande en lo económico. Luego, en el pico de abril, más paro, hay un freno en el gasto y esto lo vamos a ver en la feria, ya que hay un desabastecimiento de producto terminado y textiles y también el paro afectó a algunos empresarios en el comercio.
Pensando en ello, apoyamos a algunos para que participen en la feria para activar su caja registradora, y definitivamente lo que hemos identificado es que el negocio de la moda es uno de los más elásticos: cuando la economía cae, es de los primeros negocios en caer y cuando repunta, pasa lo mismo. Entonces vemos las ferias como la posibilidad de darle un empujón a la industria, porque recordemos que el segundo semestre es el de mayor movimiento en ventas para la industria, específicamente el último trimestre. Una empresa del sector puede hacer en promedio el 55% de sus ventas en este periodo.
“Vemos las ferias como la posibilidad de darle un empujón a la industria, porque recordemos que el segundo semestre es el de mayor movimiento en ventas para la industria, específicamente el último trimestre”
¿Por qué hubo repunte de estos negocios?
Nosotros dentro de los análisis de las cifras del sector, interpretamos ese repunte por la elasticidad de la industria. Si bien el consumo de moda aumentó, las categorías cambian. La compra cambia, pero las medianas y grandes empresas pudieron resistir a través de la diversidad de canales de compra. Hay incluso empresas con 14 canales de venta, y muchas hicieron esto, porque de otra manera, sus ventas se hubieran movido en terreno difícil. Las grandes superficies siguieron activas, por ejemplo. Y ahora, las ventas en línea aumentaron de manera exponencial. Estas dieron el 7,8% adicional en las ventas de un año.
Pero hay varios factores que inciden en este repunte de ventas, más uno adicional: la compra por revancha. Cuando la gente se encierra contiene el gasto, pero cuando sale, compra.
Muchos criticamos a la industria por guardar silencio en el paro nacional. ¿Cómo lo abordan ustedes?
Esta feria tiene un enorme componente social. Veremos marcas más humanas. A raíz del paro, sí hubo muchas críticas a la industria y a varias marcas por su no pronunciamiento. Y puede que a nivel comunicacional no lo hagan, pero por ejemplo, hay iniciativas como la de Leonisa en el agro, que compra la cosecha a cultivos alrededor de la ciudad para garantizar esa circularidad. Y son historias que no se cuentan. También seguimos con los programas de transformación empresarial, con Valiente, donde trabajamos con migrantes y sobrevivientes del conflicto armado para que la moda les brinde una oportunidad y podrán trabajar en esta feria . Creo que ese componente social y de retribución a la sociedad estará muy fuerte en la feria y generaremos empleo a través de ella.