¡Súper Sheriff! Con colombianos, los de Moldavia destrozaron el orgullo del Real Madrid
Champions. Álvarez Balanta, otra vez figura con el Brujas; dura derrota del Oporto, con Díaz y Matheus en cancha; mientras que Messi definió el derbi de los millones para el PSG, ante el City
El sorprendente Sheriff Tiraspol de Moldavia quería seguir sorprendiendo a nivel europeo. Luego de meterse en la Champions, ahora era el turno de visitar la Casa Blanca, hogar donde habitan la mayor cantidad de trofeos en un solo equipo: Real Madrid. Capitaneados por el colombiano Frank Castañeda, salir vivos del Santiago Bernabéu se antojaba un cuento de hadas.
Pero a veces los cuentos se replican en la realidad y la historia de cenicienta fue tomando color. Ante un Real Madrid apático, que creyó ganarlo solo con la camiseta, el Sheriff fue perdiendo el miedo escénico. Firmes en defensa, con otro tricolor como lo es Danilo Arboleda, los de Transnitria se fueron animando a más.
Y así llegó el gol que silenció al Bernabéu. El lateral Cris Silva mandó un centro medido al segundo palo, que el uzbeko Djasur Yakhshibaev cabeceó para batir a Thibaut Courtois y cultivar el sueño. La historia pudo ser incluso más sorpresiva cuando el propio goleador tuvo el 2-0 en sus pies a pase de Castañeda, tras error del portero merengue.
Pero los sueños, sueños son y el Madrid se puso bravo. En los últimos minutos del primer tiempo ya tuvo varias ocasiones para empatarlo, pero no lo logró. Con la presión, los merengues aceleraron y cuando apareció Vinicius Jr., el empate estaba al caer.
Cayó de penal sobre el brasileño. Luego de que el árbitro se apoyara en el VAR para enmendar su error, Karim Benzema definió con fuerza para igualar el juego y pincharle el globo al Sheriff. Igual, llevarse un punto de Madrid no caía nada mal.
A aguantar. Sheriff luchó todo el partido, pero la inercia indicaba una victoria blanca. Sin embargo, los que juegan por Moldavia iban a vender caro su pellejo, si les tocaba perder. Pero algo más iba a pasar en la noche de fantasía.
Sobre la hora, cuando el Madrid lo merecía, el luxemburgués Sebastien Thill hizo el gol de su vida con una volea de zurda desde 25 metros y con eso ganó el Sheriff en el Bernabéu. Sí, créalo.