Volkswagen Taos: Toda la comodidad para la familia
El espacio interno y las capacidades de la Volkswagen Taos se han convertido en una referencia crucial en las SUV medianas.
Algunos alcances de comodidad y tecnología la acercan más a los autos de lujo que a un “auto del pueblo”.
Si esta página parece que ha probado solo camionetas Volkswagen en los últimos meses, es porque la marca de Wolfsburgo ha hecho una lucha frontal para copar todos los segmentos de las SUV. Donde hace 5 años estaba únicamente la Tiguan, ahora hay seis líneas que van desde la popular T-Cross hasta la enorme Teramont, y Porsche Colombia ha logrado ofrecer todas las versiones en el complicado mercado colombiano. En la mitad de esta lucha está la Volkswagen Taos, que llega a una competencia dura pero con mucho que decir.
El corte de la Taos demuestra tanto la relación de familia con la Tiguan como con la Seat Ateca, con quien comparte plataforma. Esta versión hecha en Argentina cuenta como su principal elemento de identificación externo con un frente más robusto y muscular, lleno de líneas cuadradas y con líneas algo recargadas y confusas.
Por detrás el corte es muy familiar, con el paral trasero levemente inclinado que va desde la T-Cross hasta la Teramont. Una característica importante es el amplio espacio trasero, que se denota con las enormes puertas: con un diseño originalmente planeado para China, donde una de las principales características evaluadas es la amplitud de la banca trasera, la Taos ofrece muchísimo espacio entre sillas, lo que ayuda también a quienes requieren sillas de bebé.
Esta sensación, que en algunos casos parece a la de las limusinas con chofer, se potencia con detalles lujosos en el interior como luces de ambiente con colores programables. Así mismo, el tablero digital de 10 pulgadas y la pantalla de 9 embebida en el tablero son dignos de sus primas Audi. Aún así hay algunos detalles, como los plásticos duros en el tablero y las sillas traseras no abatibles, que denotan un origen más utilitario.
Motor más que suficiente
En la plataforma el motor de rigor es el 1.4 TFSI turbocargado que es un ícono del grupo VAG. Desde un Skoda hasta una Audi Q3, los automóviles de la marca cuentan con esta pieza que, en la Volkswagen Taos, llega acoplada a una transmisión automática de seis velocidades.
El resultado es el correcto para la gama: los 150 caballos y 250 Nm de torque están bien repartidos y hay una respuesta ágil en ciudad y para sobrepasos. En carretera el consumo es bueno, bordeando los 45 km/galón, aunque queda la duda de qué pasaría con una transmisión de ocho velocidades como la que tiene la Seat Tarraco.
Donde brilla la camioneta es en la suspensión, razonablemente cómoda en destapados (teniendo en cuenta las limitaciones de una plataforma crossover) pero muy bien puesta a altas velocidades, y en los frenos, con una respuesta excelente. En general se comporta muy bien para el segmento, pero sus elementos más destacados están en el equipamiento.
Los juguetes cuestan
La Volkswagen Taos trae desde la versión inicial, Comfortline Select, opciones muy interesantes. Todas cuentan con aire acondicionado bizona, cargador inalámbrico, tablero digital, sensor de lluvia, monitor de presión de llantas, infoentretenimiento con Apple Carplay y Android Auto, y seis airbags. Pero las asistencias y ayudas de manejo se van a la versión full equipo, Highline, que probó esta página.
Entre estas está control de crucero adaptativo (la básica viene con control simple), sensores de punto ciego y de tráfico cruzado, luces inteligentes que giran en curva para alumbrar el interior y asistencia de frenado de peatones. Las otras diferencias son un tablero más grande, las luces de ambiente y algunos detalles en los rines y barras de techo.
Pero el salto para acceder a estas ayudas es fuerte, más considerando la difícil situación tanto del dólar como de la escasez general de chips para todas las marcas. Esto ha disparado los precios, y en el caso de la Taos, la diferencia entre versiones es de 15 millones de pesos, una dura selección cuando el vehículo original cuesta 110.
Esto hace que, si la Taos básica se compara en precio con camionetas como la Mazda CX-30, la Toyota Corolla Cross o la Kia Sportage, la más equipada tenga rivales mucho más difíciles. Nombres como Ford Escape, Renault Koleos, Toyota Rav4 y Mazda CX-5 ya entran a una gama donde otras tecnologías como la hibridación entran a ser cartas a tener en cuenta.