Jack Grealish, un crack de la moda
Su traspaso en más de 100 millones de euros fue récord histórico de la Premier League y ahora será imagen de una marca de alta costura
Jack Peter Grealish es un crack de los nuevos tiempos, con una carrera fulminante avalada con tanto talento como marketing y despliegue mediático, y su traspaso al Manchester City en 110 millones de euros movió al mercado europeo, estableciendo el récord absoluto de un pase en la Premier League. Según los viejos conocedores de esa liga, su jerarquía dista años luz de ídolos como Bobby Moore, Charlton, Lineker o Beckham, pero a muchos, su imagen de chico malo les recuerda George Best.
El mediocampista de 26 años, proveniente del Aston Villa, juega con las medias abajo y, más que eso, los analistas comparan a ambos por su escaso apego a la disciplina deportiva y su afición a la bohemia...
Como sea, el nuevo astro del City agrega ahora otro hito: fue contratado por la reconocida empresa italiana Gucci para empezar a vestir su marca, ahora formalmente, a cambio de una cifra millonaria que también parece de fantasía.
Según los registros del mercado fashion, es la primera vez que la compañía italiana de la tiene a un futbolista como cara, ya que hasta ahora siempre tuvo entre sus representantes a cantantes y artistas populares.
La prensa británica reseña que el arribo de Grealish al mundo de las tendencias en el vestuario de alta gama recuerda la época dorada de David Beckham, cuando el ex Manchester United y la selección de Inglaterra descubrió que, más allá de la cancha, podía generar millonarias ganancias con su imagen, convertido en gancho de un mercado ávido de seguir a las figuras influyentes.
En rigor, Grealish, hasta ahora, no deslumbra en Manchester City ni logra desterrar su fama polémica. En febrero, la tiktoker Mizormalc publicó imágenes del futbolista intentando ingresar ebrio a un bar. En 2015, fue grabado borracho en una playa de Tenerife. Durante el confinamiento del año pasado, lo detuvieron por conducir ebrio y tras estrellar su auto contra otros dos vehículos, fue multado en 100.000 libras. Como sea, la elección de Gucci consagra al chico malo como un formidable producto publicitario, mientras los hinchas del City anhelan que alguna vez alcance aquella genialidad del mítico Best en la cancha.