Caiga a La Betplay
MANIZALES. La segunda fecha de la Copa Betplay de Microfútbol seguirá hoy en El Guamal: 7:00 p.m. Fitness Zona - Los Mismos; 8:00 p.m. Estructuras Livianas y Acabados - La
Catedral del Celular; 9:00 p.m. El Combo de
Pelu - Cable Ospina.
José Miguel Rodas, después de los jugadores, técnicos y dirigentes campeones de la Copa Libertadores, es considerado otro de los símbolos de ese equipo de 2004.
Rodas laboró en el Blanco durante 21 años, periodo en que ganó tres títulos por la Liga y la Copa Libertadores de América, sin contar las finales en la Copa Suramericana y la Copa Intercontinental.
El kinesiólogo se desahogó el miércoles. Habló del presente que vive el Once Caldas.
Su mensaje
Mirando por televisión la celebración del Medellín, llena de alborozo, alegría desbordada y lágrimas, vienen a mi memoria momentos que jamás se podrán borrar. Ganar un título en el fútbol colombiano es una de las sensaciones más especiales que se pueden vivir desde cualquier ámbito.
En Manizales fuimos campeones desde 2003 hasta 2010. Ganamos todo lo que la vida y el fútbol nos permitieron. Ganamos con equipos llenos de grandes jugadores,
con dirigentes de temple que pusieron el Club sobre cualquier ego, ganamos con una prensa comprometida con la causa, sin amiguismos ni prebendas. Los técnicos lejos de polémicas se “casaron” con el Club y la justicia, acertaron en la contratación pensando en el jugador tipo para la plaza y su filosofía.
Ganamos arropados con una afición que alentaba sin parar, exigía porque lo daba todo desde la tribuna, agradecía el respeto que el jugador le demostraba a la camiseta y a la ciudad.
Era un Club como la ciudad, de puertas abiertas, donde era posible tomarse un tinto con el presidente, conceptuar con el técnico o simplemente verlo hacer una práctica de fútbol, pasaron muchas cosas propias de los comportamientos colectivos, desafueros, discusiones, peleas, etc.
Pero el camerino nunca se rompió, porque para ganar hay que dejar atrás egos, acusaciones y soberbias; para ganar hay que sumar en vez de restar, darle a la gente la certeza que su Club y sus integrantes vibran y sienten de la misma manera que ellos, los insustituibles... los hinchas.
Muchas veces hicimos todo para ganar como en aquel 1998 o 2011, pero a veces no basta con eso, el fútbol es caprichoso y le da la gloria a quien la merece menos, pero eso lo aprecian todos hinchas y aún masticando la dura derrota queda una palabra de dignidad, respeto y admiración por haberlo dado todo.
Sin reproches.