Signos de alerta
Nariz congestionada y sangrado nasal.
Sensación de masa en la garganta.
Inflamación del cuello.
Alteraciones en la voz: cambios de tono o ronquera.
Dificultad para deglutir alimentos o ingerir bebidas. Úlceras, manchas o lesiones en la cavidad oral que no sanan.