Estos son los cinco legados que dejó Detonante 2019:
1. Segunda fase de la planta de biotransformación
Quibdó produce diariamente 8 toneladas de basura. Actualmente, la planta de biotransformación solo procesa el 10 % de los residuos orgánicos de la ciudad, a partir de los desechos recogidos en la plaza de mercado, las legumbrerías y los restaurantes. Dispuestos en camas, las lombrices los transforman en abono, que, posteriormente, sale a la venta.
En la quinta edición de Detonante se anunció la construcción de la segunda fase de esta planta. Tendrá un espacio adecuado para procesar plástico, cartón, vidrio y latas. María López, cofundadora de Detonante, indicó que la empresa Coca-cola financiará la construcción de esta estructura. “Detonante sueña con que Quibdó sea la primera ciudad del país en economía circular, en términos de desechos”, comentó.
López explicó que Detonante asumió el compromiso de crear diez plantas de biotransformación y, en cinco años, transformar la totalidad de basura de la capital de Chocó. “Eso requiere inversiones importantes, alianzas público-privadas, pero sobre todo el compromiso de la comunidad”, dijo López.
2. Crearán fábrica de software
El director general del Sena, Carlos Mario Estrada, anunció que la entidad abrirá en Quibdó la primera fábrica de software del Pacífico colombiano en 2020. Para lograrlo, dijo que adelantarán una serie de bootcamps en habilidades digitales, programación y conocimiento tecnológico durante el primer trimestre del próximo año. Representantes de multinacionales como Amazon, Microsoft, Oracle, Google, entre otras, impartirán estos campos de entrenamiento o cursos intensivos. “La idea es que, posteriormente, esas grandes compañías que los van a capacitar los empleen”, explicó el funcionario.
Estrada indicó que el reto era preparar a 200 jóvenes de Chocó (100 mujeres y 100 hombres) antes de haber finalizado el año. “En esta edición de Detonante realizamos dos bootcamps para ambientar en temas digitales a 50 jóvenes. La idea es empezar con ellos y, paulatinamente, ir sumando más”, explicó el director del Sena.
3. El Pacífico tendrá su propio mercado cultural
Con el fin de visibilizar, potencializar y apalancar los talentos de la región, se planteó la creación del Mercado Cultural del Pacífico (Mekupa). La meta es apoyar los procesos existentes e impulsar otros que estén en etapa temprana, a partir del relacionamiento, la realización de alianzas estratégicas, la capacitación y el desarrollo de ruedas de negocios. Estas y otras tácticas buscan brindar oportunidades al sector artístico y cultural de la región.
“Los mercados culturales permiten que los artistas estallen, exploten y se disparen”, comentó Juancho Valencia, director y fundador de la empresa de producción musical Merlín Producciones.
4. Jóvenes creadores del Chocó tendrían nueva sede
La Corporación Jóvenes Creadores del Chocó aprovechó la presencia de la primera dama de la nación, María Juliana Ruiz, así como de la ministra de Cultura, Carmen Vásquez, en Detonante para solicitarles ayuda en la construcción de una sede propia.
Al término de la Bakanaka realizada en la Institución Educativa Isaac Rodríguez Martínez, en el barrio El Reposo 3, de
Quibdó, ambas se comprometieron a gestionar recursos para cumplirles el sueño a cerca de 200 integrantes de la organización. Esta, en sus 11 años de funcionamiento, ha logrado arrebatarles a las calles aproximadamente 500 jóvenes del Chocó, por medio de la enseñanza de la danza urbana y tradicional, así como del teatro.
La Corporación cuenta con un terreno adquirido con los ahorros de las presentaciones de los jóvenes en varias partes de Colombia, así como en Brasil, Alemania y España, a donde han viajado a mostrar su talento.
“Hemos descubierto el poder de la cultura para generar protección y resistencia, pero también transformación. El Pacífico se está moviendo por medio de las organizaciones sociales, sin embargo, la institucionalidad debe articularse más con esas organizaciones de base para poder reducir el desempleo y la violencia en esta región. Necesitamos protección y más respaldo, porque estamos impactando, pero no es suficiente”, dijo Katherin García, directora de la Corporación.
“Hemos descubierto el poder de la cultura para generar protección, resistencia y transformación”:
5. Generación de oportunidades
El relacionamiento e intercambio de experiencias al que tuvieron acceso los emprendedores chocoanos que participaron en Detonante les permitió hacer contactos y alianzas para potencializar sus modelos de negocio y abrir nuevos nichos de mercado.
De igual forma, varias de las empresas y proyectos productivos participantes encontraron en Quibdó oportunidades para ampliar sus mercados e incluso establecer sedes en esta región.
Martín Ramírez, fundador y director de Cáscara Tech, mostró, por ejemplo, su intención de donar su conocimiento y experticia en un taller para elaborar platos hechos a mano y con cartón, cáscaras de frutas, verduras, hortalizas y cereales, entre otros materiales.
“En Chocó sueño con implementar esta línea manual, que requiere mano de obra loca. Solo hay que invertir en maquinaria (prensa e impresora 3D) y contar con un espacio para sacar productos a buen precio, que se pueden vender en buen volumen para generar rentabilidad”, apuntó.
Según Ramírez, muchas personas apetecen y compran este tipo de productos. “Son utensilios de alta calidad y valor estético. Para la planta de biotransformación sería un espacio creativo que entraría a complementar lo que ya existe”, expresó.