Las tapas que hacen sonreír
Durante los últimos ocho años, la Fundación Sanar ha ayudado al tratamiento de más de 4.000 niños y adolescentes con cáncer por medio de la recolección y reciclaje de 25.000 toneladas de tapas. Banco AV Villas es la empresa que más aporta este material a
Cada año 2.200 nuevos casos de cáncer infantil se presentan en Colombia. Niños que si son diagnosticados de forma temprana, podrían alcanzar la cura. Sin embargo, la tasa de sobrevivencia de los pequeños entre 5 y 10 años no llega al 50 por ciento en el país.
Para darle un vuelco a este panorama, la Fundación Sanar lleva 35 años trabajando por el bienestar de los menores y adolescentes con cáncer, una organización que nació como un banco de medicamentos cuando no existían IPS y EPS, y que luego consolidó tres programas de apoyo psicológico, social y detección temprana.
Con el fin de recaudar fondos para el desarrollo de estas ayudas, en 1989 la fundación inició un programa de reciclaje de papel, cartón y periódico. Pero al poco tiempo, una de las mamás cuya hija padecía cáncer hizo recapacitar a las directivas.
“Esta mujer recogía tapas plásticas para venderlas como reciclaje y obtener dinero para los buses. Logró recolectar varias bolsas con este material, hasta que su niña falleció. Entonces, decidió donarnos lo que le había quedado sin pedir nada a cambio. Eso nos llevó a incluir las tapas dentro del programa”, asegura Alejandro Bonilla, gerente nacional de Sanar.
Pero no fue sino hasta 2012 que la iniciativa tomó fuerza con la campaña Tapas para Sanar, que invita a todas las personas e instituciones a recolectar y donar tapas para luego venderlas a empresas recicladoras que hacen nuevos productos.
“En 2013 decidimos participar en el Guinness World Records de recolección de tapas, título que ostentaba Argentina. Nos trazamos la meta de 100 toneladas en un sitio del norte de Bogotá, y en ocho horas sumamos más de 150. Somos conocidos como la fundación de las tapitas”, indicó Bonilla.
Impacto nacional
En los ocho años que lleva Sanar recolectando tapas para ayudar al tratamiento de los niños con cáncer, más de 2.000 empresas grandes y pequeñas, entidades, colegios, universidades, parroquias y jardines infantiles han donado cerca de 25.000 toneladas de este material.
Las tapas llegan a una bodega de la fundación en Bogotá, donde son vendidas a dos compañías: una que las recoge, clasifica por color, lava, seca y muele, y otra que las funde y convierte en nuevos elementos como jarras. Cada kilo tiene un valor de entre 900 y 1.400
pesos, es decir que una tonelada puede producir mínimo 900.000 pesos.
“El dinero recolectado lo invertimos en los programas de la fundación, que abarcan apoyo psicológico al paciente y la familia para que no vean al cáncer como sinónimo de muerte, sino una vida que debe ser vista a lo ancho. También hacemos campamentos y salidas lúdicas”, dijo el gerente de Sanar.
Cada año, 50 pequeños viajan a San Andrés para participar en una jornada en la que recuperan la autonomía. Según Bonilla, no se trata de un paseo, sino de un encuentro en el que entienden que la enfermedad no debe limitarlos. “A las mamás las llevamos a un spa para que recuperen su vanidad”.
La fundación brinda ayudas económicas a las familias que no cuentan con dinero para el arriendo o transporte, asegurando así que no interrumpan el tratamiento de los niños. “Le ayudamos a una mamá a montar su propio negocio de uñas”, recuerda Bonilla. A su vez, hace seguimiento a los casos y atiende problemas con las EPS.
Todos los años, cerca de 500 niños y jóvenes reciben los beneficios de la fundación. O sea que desde 2012, cuando arrancó la campaña de tapas, 4.000 pequeños han sonreído por la entrega de las 25.000 toneladas de estos residuos.
Los bogotanos pueden hacer su aporte en las dos sedes de Sanar, en varios puntos de mensajería, solicitar la recolección a domicilio (más de 50 kilos) o acudir a 36 centros comerciales.
Un banco que sana
En 2014, el Banco AV Villas realizó una alianza con Sanar para recolectar tapas y apoyar a los programas de detección temprana y tratamientos de cáncer infantil. La entidad instaló más de 300 cajas en sus oficinas y sedes administrativas.
En los seis años de esta unión, el banco ha recolectado 100 toneladas de tapas. La entidad bancaria lleva dos años como el mayor donante de material reciclable a la fundación, al alcanzar 40 toneladas de tapas entre 2018 y 2019.
“El año pasado iniciamos un programa piloto de reciclaje para reunir y reciclar papel y chatarra, que arrojó la entrega de 14,2 toneladas. El material es vendido por la Fundación Sanar para apoyar a los niños con cáncer y sus familias, con mercados, kits de hospitalización, gastos de transporte y alimentación”, dijo el banco.
En 2019, la compañía Lito le otorgó a AV Villas puntos verdes por la entrega de residuos eléctricos y electrónicos para redimirlos en bienes asignados a causas sociales. “Destinamos todo el aporte en especie a Sanar, 6.200 elementos de aseo y cuidado personal para 100 niños”, afirmó el banco.