LOS MALES
Los pueblos de la carretera se están convirtiendo en las primeras víctimas del cambio climático. Enfrentan el ascenso del nivel del mar y la erosión costera.
Desde 2012 hay registro de emisiones de metano: un gas que puede ser tres o cuatro veces más dañino que el CO2.
Desvío de ríos que bajan de la Sierra Nevada de Santa Marta y quedan represados en fincas.
Ingreso de agua dulce reducido al mínimo (mortandad de peces y hambre en pescadores).
La ciénaga no cuenta con un plan de manejo integrado.
Grandes inversionistas compran terrenos en los humedales para cultivar arroz.
Falta de gobernabilidad que convierte los problemas en crónicos.