En vacaciones, desconéctate
La Semana Santa es una época de reflexión en la que muchas personas aprovechan para viajar y salir de la rutina encontrando momentos únicos para descansar, sin embargo, no todos lo logran al mantener sus mentes ocupadas con temas que les impide desconectarse. Por eso, María Camila Morales, experta en mindfulness y docente de Yoga en Compensar, nos comparte algunas recomendaciones para relajar el cuerpo y la mente en esta temporada.
Dedicarse tiempo: alejarse de los estímulos buscando espacios cómodos y naturales, es importante para empezar a experimentar un verdadero descanso; una vez allí, cerrar los ojos y concentrarse en el ritmo de la respiración y los sonidos, son ideales para encontrar relajación.
Concentrarse: sentir la sensación del agua, si hay una piscina o en el mar, mirar a las personas a los ojos para detallar sus gestos y el tono de su voz, ayudará a hacer conciencia del momento vivido y brindará a la mente pensamientos inspiradores.
Escribir: hacer una lista en un papel de todas las situaciones que no brindan tranquilidad y quemarlas con una vela en forma de ritual, es una herramienta útil para desprender los pensamientos negativos.
Enfocarse: vivir el aquí y el ahora para disfrutar al máximo la experiencia, hará de las vacaciones un espacio realmente placentero: busca estar alegre, tranquilo y en paz.
Reconocerse: escribir una carta para sí mismo que plasme todas las virtudes, características y aprendizajes valiosos que se han adquirido a lo largo de la vida, es una acción poderosa para la mente y el espíritu.
Los días de tranquilidad y esparcimiento son necesarios para mantener un balance que aportará al bienestar físico, mental y espiritual, por eso es importante hacer el compromiso personal, y desconectarse de la rutina para conectarse con los momentos personales de introspección, llevando en el equipaje solo aquello que hagan de esos días la mejor temporada del año. BIENESTAR INTEGRAL ES DESCONECTARSE DE LA RUTINA PARA CONECTARSE CON EL
DESCANSO Y LA DIVERSIÓN
El llamado turismo religioso también estará a la orden del día en estas vacaciones. Se trata de organizar viajes para visitar santuarios o lugares sagrados, como los templos, donde además de vivir la fe, se puede admirar la arquitectura de las edificaciones sagradas.
Para los amantes de este tipo de turismo se hace interesante la contemplación del patrimonio material, el gusto por las procesiones y las celebraciones religiosas. Pero sea el significado que tenga para cada quien, lo cierto es que en Colombia existen decenas de lugares para visitar durante esta semana de descanso, como el centro histórico de Mompox, en Boyacá, la Basílica de Chiquinquirá, la Catedral de Sal en Zipaquirá, la Basílica del Señor de los Milagros, en Buga, así como en las ciudades de Popayán, Ipiales y Bogotá, donde el lugar más concurrido, sin duda, es Monserrate. “Aparte de los destinos nacionales, también está México, que es un país al cual he ido en varias ocasiones y donde su cultura, su comida y las personas son demasiados especiales, muy queridos. Este puede país convertirse en un destino muy religioso, pues allí está la Basílica, a donde cada vez que viajo voy a visitar a la Virgen de Guadalupe, y en cada viaje la experiencia es completamente diferente. Su energía, y más en Semana Santa, es increíble”, asegura Iván Lalinde.