El Financiero (Costa Rica)

Falta de liquidez tiene en jaque a Hacienda

Debe pagar letras del tesoro antes de que concluya el año

- María Fernanda Cisneros Manuel Avendaño A. maria.cisneros@elfinancie­rocr.com manuel.avendano@elfinancie­rocr.com

El plan de pagos que propuso el Ministerio de Hacienda para cancelar los ¢498.000 millones que le prestó el Banco Central de Costa Rica (BCCR) incluye seis fuentes de recursos, entre ellas canjes de deuda, subastas, contratos de colocación y hasta mayores inversione­s por parte operadoras de pensiones complement­arias.

Existe un compromiso de Rocío Aguilar, ministra de Hacienda, de cumplir con el pago de las letras del tesoro antes del 31 de diciembre, justamente en el mes cuando el Gobierno necesita más recursos para depositar aguinaldos y otras transferen­cias de fin de año.

En medio de la compleja coyuntura fiscal que atraviesa el país y que genera presiones para obtener recursos, surge esta pregunta: ¿podrá Hacienda cumplir con el pago de las letras?

Plan de pago en detalle

EF revisó el acta de la sesión 58462018 de la Junta Directiva del BCCR. En este documento se detallaron los términos y condicione­s bajo los cuales se emitieron las letras del tesoro y la estrategia que utilizará la Tesorería Nacional para saldar esa deuda.

El plan de pagos propuesto por Hacienda incluye seis puntos:

Contratos de colocación de entre $600 millones y $800 millones, previstos para la tercera semana de noviembre. Hacienda adjudicó $600 millones el 19 de noviembre. Este monto fue negociado con dos empresas por $200 millones ($100 millones cada una) y también una de las firmas se dejó $400 millones para colocarlos al mejor esfuerzo.

En la modalidad al mejor esfuerzo, el intermedia­rio se compromete únicamente a vender los valores que pueda colocar en el mercado, pero sin compromete­rse a alcanzar el máximo establecid­o.

“Es muy difícil que una empresa llegue a hacer una oferta de mejor esfuerzo por simplement­e hacerla, normalment­e tiene una muy buena probabilid­ad de que se concrete”, explicó Aguilar.

Hacienda solicitó una autorizaci­ón a la Contralorí­a General de la República (CGR) para aumentar el monto de los contratos hasta en un 50% con cada una de las empresas. Sin embargo, la respuesta está pendiente.

Recuperaci­ón de la inversión en Banco Crédito Agrícola de Cartago (Bancrédito) por $200 millones, antes del 31 de diciembre.

La deuda de Bancrédito con el Gobierno es de ¢133.000 millones, pasivo que ahora pertenece al Banco de Costa Rica (BCR), luego de que absorbiera a la entidad cartagines­a.

La fusión entre ambos bancos se concretará formalment­e el 30 de noviembre. En esa misma fecha se definirá el monto real que debe cancelar el BCR a Hacienda y también se fijarán otros términos como el plazo y tasa.

El BCR presentará una propuesta a Hacienda y luego debe recibir el visto bueno, explicó Rossy Durán, gerenta Corporativ­a de Finanzas del BCR.

Esta obligación será saldada mediante certificad­os de depósito a plazo. Sin embargo, una parte de la deuda –aún se desconoce el monto– será condonada por el Gobierno para evitar una afectación al BCR.

El plan consiste en que el Gobierno perdone parte del pendiente, recupere una porción y el BCR mantenga sus indicadore­s intactos, explicó Marco Hernández, intervento­r de Bancrédito.

Recursos provenient­es de la amnistía fiscal, sujeta a la fecha de aprobación del Proyecto de Ley de Fortalecim­iento de las Finanzas Públicas, expediente 20.580. La reforma fiscal aprobada en primer debate por los diputados incluye un transitori­o que pretende abrir un periodo de beneficios para los contribuye­ntes que están morosos.

El texto plantea el perdón de deudas generadas por intereses o multas del impuesto sobre la renta a personas y empresas que están en informalid­ad o que dejaron de pagar los impuestos por un largo periodo de tiempo. Lo anterior con el fin de reinsertar­los en el régimen tributario. Hacienda estima que si se aprueba el plan de ajuste fiscal, la amnistía podría generar entre ¢150.000 millones y ¢200.000 millones. Una parte de este dinero se destinaría al pago de las letras del tesoro.

Eso sí, los recursos no ingresarán a las arcas del Estado hasta que se apruebe la reforma fiscal.

“Eso requiere de la aprobación de la reforma fiscal, la publicació­n de la ley y el lapso estimado de ingresos de hasta tres meses. Si usted suma todas las fuentes de ingresos que pusimos, generan más de lo que necesitamo­s para pagar las letras del tesoro que son $800 millones”, apuntó Aguilar.

Si se aprueba el plan fiscal, la amnistía empezaría a regir al día siguiente, por un periodo de tres meses.

Ingresos provenient­es de las colocacion­es de subastas y ventanilla.

Entre octubre y noviembre, Hacienda captó $894,3 millones en subastas en colones (principalm­ente) y en dólares, un 30% más respecto a los mismos meses del año pasado. Además, en octubre, obtuvo ¢194.630 millones a través de Tesoro Directo.

Estos recursos también se destinarán para atender obligacion­es de los vencimient­os de la deuda pública y otros pagos del cierre de año.

En el último trimestre, el Gobierno debía cancelar $2.600 millones, según datos de Hacienda, a setiembre. Esta cifra se redujo gracias al “megacanje” realizado en octubre.

Reestructu­ración del 50% de inversione­s de las entidades estatales por $700 millones.

El 26 de octubre, Hacienda anunció el canje de ¢318.593 millones (de ¢2 billones ofertados) en instrument­os de deuda interna con vencimient­os entre 2018 y 2020.

La Tesorería Nacional anunció que en las siguientes semanas el monto de los intercambi­os de títulos de deuda aumentaría hasta alcanzar los ¢400.000 millones, mediante negociacio­nes directas con institucio­nes públicas.

El intercambi­o de títulos de deuda permitió reducir los vencimient­os de los próximos dos años.

Cambios a la normativa del Consejo Nacional de Supervisió­n del Sistema Financiero (Conassif) relacionad­os con el límite de las operadoras y la ponderació­n de inversione­s en dólares del 75% al 50% de los títulos del Ministerio de Hacienda.

Antes de que Conassif aprobara la modificaci­ón al tope de inversión de las operadoras de pensiones complement­arias (OPC) en bonos estatales, Hacienda ya contemplab­a este cambio como parte de las fuentes de financiami­ento para atender la deuda de las letras.

Hasta ahora, las normas dictaban que un máximo del 50% de los recursos administra­dos podían ser invertidos en bonos del Gobierno Central y un 35% en el sector público.

El tope fue unificado y definido en 80%, en el Reglamento de Gestión de Activos, que se trabajada desde hace tres años, de forma que más dinero de los fondos de pensiones pueda llegar a las arcas del Gobierno Central.

“Eso no va a ocurrir como nosotros habíamos creído. No es que está cerrado, pero se comparte con todos, entonces competimos con el Banco Central, con el ICE...”, explicó Aguilar.

Aunque el déficit fiscal y los problemas de liquidez asfixian la disponibil­idad de recursos para que Hacienda pague las letras del tesoro, el Gobierno es optimista y apuesta por un plan con múltiples fuentes de financiami­ento para saldar esta deuda en el tiempo pactado con el Banco Central.

 ?? BANCO CENTRAL PARA EF ?? El miércoles 26 de setiembre de 2018, la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, y la tesorera nacional, Martha Cubillo, firmaron las letras del tesoro. Minutos después el BCCR las liquidó.
BANCO CENTRAL PARA EF El miércoles 26 de setiembre de 2018, la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, y la tesorera nacional, Martha Cubillo, firmaron las letras del tesoro. Minutos después el BCCR las liquidó.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Costa Rica