TSE aprobó 14 de los 65 referéndums solicitados desde el 2006
Tres procesos siguen abiertos y solo uno se realizó
La figura del referéndum es relativamente nueva en la democracia de Costa Rica: tiene menos de 20 años de haberse reglamentado; sin embargo, los costarricenses han intentado promover una consulta de este tipo en múltiples ocasiones.
Según datos solicitados por EF al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), desde el 2006, año en que se emitió la Ley de Regulación del Referéndum, esa entidad recibió 65 solicitudes para iniciar un referéndum. No obstante, la mayoría fue rechazada y archivada.
Cualquier ciudadano puede solicitar ante el TSE la autorización para recoger firmas para aprobar algún proyecto de ley o someter a votación algunos temas, con excepciones: no se pueden someter a referéndum materias presupuestaria, tributaria, fiscal, monetaria, crediticia, de pensiones, seguridad, aprobación de empréstitos y contratos, ni actos de naturaleza administrativa.
Por un periodo máximo de 10 meses, el proponente debe recoger firmas equivalentes al 5% del padrón electoral, lo que actualmente supone cerca de 181.000 signaturas.
Las 65 peticiones recibidas por el TSE se basaron en una diversidad de asuntos. EF identificó, al menos, 19 temáticas distintas que van desde derechos humanos y división administrativa hasta reformas constitucionales.
Este último ha sido el tema más recurrente. Ocho proposiciones impulsaron reformas a la Constitución Política, varias de ellas con la intención de introducir la revocatoria de mandato del presidente y diputados. Este es un procedimiento mediante el cual los votantes pueden dar por finalizado el periodo de un cargo electo por voto popular, algo así como “despedir” al mandatario de turno. Ninguno avanzó.
El tema electoral estuvo en siete propuestas. Sobre esto se han basado los dos intentos realizados este año, impulsados por el mismo ciudadano. Uno de ellos en torno al mecanismo de votación y otro sobre la unificación de los comicios nacionales con los municipales, ambos rechazados, pues el TSE consideró que lo que se propuso fue un plebiscito y no un referéndum.
La tercera cuestión más común ha sido el intento de convocar a una Asamblea Constituyente, con seis propuestas. Todos los intentos han trastabillado por distintas razones y en la última vez, en el 2021, la Sala IV excluyó de la consulta popular la posibilidad de convocar una asamblea de ese tipo.
Después de estos tres grandes temas, siguen otras materias bastante singulares. Por ejemplo, en el 2007 un ciudadano propuso que, por medio de referéndum, se votara sobre la colocación de agua bendita en
las ventanillas de atención de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
En el 2008 se impulsó una votación para crear el Instituto Costarricense de Reciclaje y otra persona presentó una solicitud para reinstalar la pena de muerte, abolida en Costa Rica desde 1882. También en el 2008, el excandidato presidencial Juan Diego Castro solicitó recoger firmas para convocar un referéndum para equilibrar los
derechos de las víctimas con los de los delincuentes.
Empleo público, matrimonio homosexual, maltrato animal, plataformas tecnológicas de transporte y la apertura del monopolio de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) son otros temas de las peticiones para recoger firmas con miras a un referéndum.
14 aprobados
De las 65 solicitudes, 14 recibieron luz verde del TSE para la recolección de firmas. De ellas, 11 finalizaron sin éxito. Estos son los siguientes:
2006: para decidir sobre el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Centroamérica, República Dominicana y EE. UU. Finalmente, se archivó, pues el Gobierno de entonces y la Asamblea Legislativa convocaron un referéndum.
2007: sobre dos proyectos relacionados con obtenciones vegetales. Finalizó el proceso, pues la Asamblea Legislativa aprobó leyes al respecto.
2008: dos peticiones sobre el matrimonio homosexual, pero, al tratarse de derechos humanos, la Sala Constitucional detuvo ambos procesos.
2011: dos solicitudes aprobadas. Una sobre reformas a la Ley de la CCSS, que se archivó por una cantidad insuficiente de firmas; y otra sobre un proyecto de ley en torno a la creación de comisiones de control ciudadano, cuyo proponente incumplió el plazo de presentación de firmas.
2013: sobre la aprobación o no de dos proyectos de ley relacionados con el medio ambiente, pero el TSE, tras consulta a la Sala Constitucional, determinó que resultaba contrario a la Constitución.
2014: un referéndum sobre un proyecto de ley para penalizar el maltrato animal recibió luz verde, pero se terminó archivando, pues el tema era similar a una ley aprobada.
2015: para someter a referéndum un proyecto de ley sobre el salario mínimo en el sector privado, pero la Sala Constitucional anuló el proceso.
2016: sobre apertura del monopolio de Recope, tuvo visto bueno del TSE. Los proponentes no han aportado formularios para recolectar firmas. Es el único caso en que el proceso recibió un archivo técnico por inactividad. Ese año, por primera vez un intento de referéndum para la convocatoria a una Asamblea Constituyente fue aprobado, pero la Sala Constitucional anuló el trámite.
En trámite
Tres proyectos de referéndum fueron aprobados y el proceso está abierto. Es decir, en un futuro se podría acudir a una votación, si prosperan las gestiones. Uno de ellos es del 2016, su trámite fue detenido por la pandemia y luego reanudado. Ese año, el ciudadano Carlos Roldán solicitó autorización para recolectar firmas para someter a referéndum un proyecto de ley que denomina Ley para el Aprovechamiento de los Recursos Energéticos Nacionales. TSE indicó que los formularios de recolección de firmas están listos para ser retirados.
El segundo es del 2019. Ernesto Alfaro y otros ciudadanos propusieron un referéndum para la apertura del mercado nacional de hidrocarburos. Los gestores tienen pendiente imprimir los formularios para ser visados por el TSE.
El tercero también es del 2019. El exdiputado del Frente Amplio Jorge Arguedas pidió recolectar firmas para llevar a consulta popular una reforma al decreto-ley del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE). El TSE tiene pendiente aprobar los formularios de recolección de firmas.
El único realizado
Solo un referéndum ha convocado a los ticos a votar. En el 2006 hubo dos intentos de llamar a una votación popular para decidir sobre el TLC con EE. UU. Uno de ellos se rechazó por falta de fundamento legal, mientras el segundo, impulsado por José Miguel Corrales, tuvo la aprobación del TSE.
Sin embargo, ese proceso se cerró, pues el entonces Gobierno de Óscar Arias y la Asamblea Legislativa convocaron a un referéndum sobre el tema. Esa combinación es una de las tres vías para llamar a un referéndum. En ese caso, el Gobierno de turno necesita al menos 29 votos de diputados para confirmar la convocatoria.
Esa consulta se celebró el 7 de octubre del 2007 y el resultado fue la aprobación del Tratado de Libre Comercio.