Estado de ánimo e iluminación, ¿Qué tienen en común?
¿ Sabía que la iluminación de un lugar puede influir directamente en cómo nos sentimos? Las luces frías o cálidas pueden incluso afectar el comportamiento de una persona. Al momento de decorar, escoger el bombillo correcto puede marcar la diferencia en cómo nos hace sentir un lugar específico.
El factor de temperatura de la luz se mide en kelvin (K), siendo los números bajos más cálidos y los altos más fríos.
Tomando en cuenta los patrones de iluminación, es posible llegar a producir diferentes estados de ánimo. Por ejemplo, una habitación con mayores niveles de iluminación produce una atmósfera alegre y estimulante, mientras que los niveles bajos crean ambientes de relajación y descanso.
Sabiendo esto, la tarea de escoger la iluminación adecuada para cada espacio se convierte en una prioridad. A continuación encontrará varios consejos que le ayudarán a encontrar su mejor opción para la iluminación de cada área del hogar, dependiendo de su función.
Primero empiece por decidir qué tipo de luminaria necesita:
SUSPENDIDAS. Estas cuelgan del techo y generalmente son decorativas. Muchas dan iluminación al espacio completo. Busque que el cable sea largo para que pueda adaptarlo a la altura que necesite.
EMPOTRADOS. Estas funcionan bien cuando la altura de los techos es baja y no querrá reducir el espacio. Tendrá que tomar en cuenta que se requiere un falso platfond, u otra preparación especial. La luz de estas luminarias es más suave que si tuviera solo la lámpara en el socket. Aunque no todos son decorativos, ayudan a resaltar detalles arquitectónicos. DE MESA. Como su nombre lo indica, se colocan sobre una mesa. Se usan más comúnmente para mesas laterales en la sala o sobre los burós, aunque también podrá encontrar luminarias de mesa para su escritorio o biblioteca. Su luz es tenue, por lo que no espere realizar una cirugía con una luminaria de mesa, pero son ideales para leer.
DE PIE. Este estilo, además de dar calidez a una habitación, sirven como elemento focal. Por lo general, necesitan más espacio en la habitación para poder ser apreciadas. Muchos de ellas tienen pantallas y las puede encontrar para luz directa, indirecta o la combinación de ambas.
Luego de elegir el tipo de luminaria que necesita tome en cuenta estos consejos de iluminación:
PARA ESPACIOS DE RELAJA
CIÓN. Antropológicamente el ser humano durante muchos siglos estuvo expuesto principalmente a luces cálidas (sol, fuego) lo cual condicionó nuestro cerebro a sensaciones más “cómodas” bajo tonos que van desde los 2.500 K hasta los 3.500 K.