La Nacion (Costa Rica) - Revista Dominical
Antes que todo, Physical Zone es una marca familiar: se inició con don Carlos Cordero y doña Dora Cahvarría y ahora continúa con sus hijos
con marcas deportivas.
“Mi hermano y yo éramos maratonistas y los compañeros siempre nos pedían ropa para entrenar”, explica Alexandra Cordero, una de las gemelas.
Con esto en mente, la fábrica empezó a especializarse en ropa deportiva hasta que en el 2001 lograron su primer contrato grande. Ya no solo armarían piezas como maquila sino que escogerían telas y los “ingredientes” correctos para confeccionar ropa deportiva de calidad.
“Coser lycra o ropa para ejercicio es mucho más difícil, se tiene que tener un cuidado especial, pero aquí podemos decir que tenemos manos expertas en esto”, explicó doña Dora.
Durante la visita a la fábrica es inevitable detenerse en el cuidado que conlleva cada paso: desde la impresión de las telas por medio de sublimación, hasta los dos controles de calidad.
En esa fábrica de Pérez Zeledón se han elaborado prendas para marcas como Asics o New Balance, y por supuesto, Physical Zone, una marca que comparte iniciales con su lugar de origen: PZ.
DETALLISTAS
Physical Zone surgió 10 años atrás con la idea de competir con los grandes. Para elaborar los pedidos de marcas extranjeras estaban trayendo telas de Europa y Estados Unidos, que pedían grandes estándares a la hora de elaborar las prendas.
La familia quiso aplicar ese conocimiento al crear una marca con buenas hechuras y los mejores materiales; ese es el norte de Physical Zone.
“Nos dimos cuenta que podíamos hacer un producto propio y competir. Si uno hace lo menos posible es fácil que