La Nacion (Costa Rica) - Revista Dominical
Tras los fulgores del cometa
en las Cartas a Luicilius de Séneca, el filósofo nos cuenta lo que Sócrates le respondió a un joven que había recorrido al mundo y seguía tan desencantado como siempre. “No me extraña: has cometido el error de viajar contigo mismo”.
En una de estas andanzas, Liszt tuvo que pernoctar en un albergue de montaña. Viajaba con la bellísima Lola Montes, fogosa bailarina española, reconocida como el Vesubio de los affaires amorosos tectónicos.
En el registro de la posada, y para estupor del hostelero, Liszt consignó las siguientes respuestas.
Nombre: Ferenc Liszt. Profesión: desatador de tempestades.
Nacionalidad: magiar de la cuna a la tumba.
Credo religioso: franciscano y gitano.
Lugar de procedencia: las dudas.
Destino final: la Verdad. Díganme: ¿no es esto hermoso? Usó la versión magiar y no alemana de su nombre: Ferenc en lugar de Franz. La cita “de la cuna a la tumba” hace alusión a uno de sus poemas sinfónicos, que lleva justamente este título (una de sus piezas más extrañas y vanguardistas). Y luego, amigos, ¿no es cierto que todos venimos de las dudas y vamos hacia la Verdad? Lo de “franciscano y gitano” sugiere que, aunque profundamente religioso (lo era de manera auténtica, y ello desde su adolescencia), no le diría “no” a alguna pequeña travesura gitana, al ludus vital, al espíritu de juego. Por lo que a “desatador de tempestades” atañe, es cierto que Liszt desencadenó tempestades sociales, románticas, eróticas y musicales por doquier anduvo.
Fíjense ustedes que esa noche, en ese albergue desconocido a la vera del camino, él y su compañera desmantelaron la habitación que les fue asignada. No me pregunten qué fue lo que hicieron o con cuánta intensidad lo hicieron, pero a la mañana siguiente había cortinas desgarradas, sillas rotas, cama quebrada, adornos dispersos por el suelo, libros desperdigados (los que Liszt siempre llevaba con él: la Biblia, el Paraíso Perdido de Milton, el Fausto de Goethe, la Divina Comedia de Dante, y las poesías místicas de Lamartine), sábanas, cobijas en tremolina, almohadas desgarradas y vacías de su relleno de plumas… Era el paisaje de devastación propio a una sesión amatoria piroclástica y magmática, o a un pleito de cantina entre dos rivales equipotenciales.
Liszt bajó con su compañera, ambos ya repuestos y acicalados después de la erupción volcánica, y le explicó al hostelero que la habitación “había sufrido algunos daños, pero que él estaba listo para pagarlos ya mismo”. El hostelero, que sabía quién era él,
que jamás viviera, no cobraba un céntimo por sus lecciones: consideraba que aquello era mercadear un don divino, que le había sido concedido a él gratuitamente. Tan solo pedía de los alumnos que le concedieran un pequeño homenaje ritual: besarle la mano al terminar la lección.
es una pincelada exponencial a todo el trabajo creativo del artista. Son cerca de 70 piezas elaboradas en cerámica las que se podrán apreciar en la muestra. Los elementos que remiten a la herencia indígena son temas recurrentes en la producción de Selva. La cerámica intercala entre el oro y el jade y sus fusiones que han caracterizado su trabajo, especialmente en las figuras tropoidales.
Biblioteca Nacional.
Exposición virtual disponible en www.sinabi.go.cr.
Todo el día.
Los documentos históricos resguardados en la Biblioteca Nacional relacionados con la Independencia de Costa Rica están disponibles para la atención del público. Hay fotografías, noticias, artículos de periódicos y literatura que repasa los datos más importantes de la declaración de vida independiente en nuestro país. infancia en el arte, y de manera muy particular en la pintura, aunque incluye otras manifestaciones plásticas. Desde el siglo XIX y hasta el siglo XXI, se producen y circulan diversas figuraciones del niño: la imagen votiva, el retrato aristocrático, la representación romántica de la pobreza y la orfandad, la infancia campesina como retrato de la nación, la infancia educada como símbolo de civilidad. Algunos abordajes más recientes, como las obras de Adrián Arguedas, Sofía Ruiz, Alberto Murillo y Leda Astorga presentes en esta exposición, exploran justamente la naturaleza de la infancia frente a la imagen que de ella fabricamos.
De martes a sábado de 8:30 a. m. a 4:30 p. m. y domingos de 9 a. m. a 4:30 p. m.
Se trata de un conjunto de nuevas obras, curadas por Paz Monge, que muestran la exploración de la pintura con relación al paisaje natural y las estructuras urbanas en concreto.
Estas son algunas de las exposiciones de arte virtuales y presenciales disponibles en el país.
JESSICA ROJAS CH.
2020.
Abierta hasta diciembre