¿Cómo es la cirugía?
Se conoce con el nombre de “craneotomía en paciente despierto con tumor cerebral” y consiste en que la persona hable e interactúe con el personal del quirófano para que los médicos no “toquen” áreas clave que puedan dañar el funcionamiento del cerebro. Requiere una preparación previa, donde se le explica al paciente el tipo de técnica al que será sometido y se le realizan pruebas neuropsicológicas, como pedirle identificar el nombre de objetos que se le muestran en imágenes y medir su tiempo de respuesta. El día de la cirugía la persona es colocada en la camilla con una inclinación de 30°. Luego se aplica anestesia local en la cabeza, se abre la piel y se extrae una porción de hueso y de membrana craneal en la zona donde se ubica el tumor. En ese momento se realiza un ultrasonido para determinar la localización, tamaño, forma y características del tumor del paciente. Posteriormente, el neurocirujano estimula con un electrodo (con dosis bajas de descargas eléctricas) las zonas del cerebro en las que se supone que están ubicadas las áreas asociadas con el habla y las funciones motoras. El paciente permanece despierto durante la intervención. El psicólogo le pide que hable, que mueva determinadas partes del cuerpo, y vuelve a pasarle una serie de imágenes para que las identifique. Dicho procedimiento se realiza en Costa Rica en los hospitales México, Calderón Guardia y San Juan de Dios, de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). También se ha practicado en el hospital Enrique Baltodano, de Liberia, y pronto se hará en Perez Zeledón.