Ramírez se reinventa y ofrece más alternativas
Nacional ejerció más presión contra EE. UU. y cambió sistema ante México
El libreto de Óscar Ramírez se había vuelto de conocimiento público. Los montajes tácticos del Macho eran conocidos por propios y extraños, al punto de que todos sabían qué esperar en cada puesta en acción. Pero ante Estados Unidos yMéxico logró reinventar su trama.
En el guion ante los estadounidenses, Ramírez captó la atención al utilizar su tradicional 5-4-1 pero revolucionado, con una presión asfixiante y más libertades ofensivas.
Contra los aztecas no tuvo problemas en reescribir el libreto y cambiar a un 4-4-2.
Dos versiones. Enel duelo contra EE. UU., el timonel detectó que el oponente gustaba de salir con balón dominado. Por ello, con su mismo esquema base rodó una secuencia casi perfecta, con hasta seis hombres en el campo rival, ahogando todo intento de armado.
El delantero fue acuerpado por los dos volantes abiertos, el mixto y el contención iban hasta las líneas enemigas a hacer superioridad en el centro del campo, y los dos laterales debían ir lo más arriba posible para anular las incursiones enemigas por las bandas.
La misión primaria era recuperar rápido y la ejecución fue digna de aplaudir, aunque necesitó de un gran despliegue físico en el ida y vuelta para evitar contragolpes. Los dos goles de la
Tricolor nacieron de robos de balón en la cintura de lacancha y así se consumó un triunfo en Estados Unidos, después de 32 años de espera.
Por su parte, en el choque con México, el Macho optó por algo similar, aunque esta vez no dio frutos, porque los aztecas acortaron la cancha sin pelota, tanto atrás como adelante, y supieron romper la línea de presión con velocidad en el traslado, precisión, transiciones rápidas y mucho vértigo por las bandas.
Los conductores de la Nacional nunca tuvieron comodidad para recibir y muchomenospara asociarse en posesiones largas, lo queobligó a los centrales a jugar largo una y otra vez.
La dificultad y el verse abajo en el marcador llevaron a Ramírez a ajustar su libreto. Pasó a una línea de 4-4-2, con lo que fortaleció el centro del campo y le dio una mano al delantero. Bajo este planteamiento, la
Sele recuperó la redonda, al verse en superioridad por el centro y encontrar a sus volantes, mientras que en ofensiva se sumaron los dos mediocampistas por afuera y acuerparon a los dos atacantes. Todos estos movimientos hicieron que se llegara al empate y le dieron una esencia distinta al combinado patrio para lo que viene.