Wílmer reaccionó con lágrimas por el llamado
Wílmer Azofeifa no había perdido la fe de ser llamado a la Selección Nacional, pero al escuchar su nombre, lloró.
“Estaba acá en mi casa de habitación, en Guápiles.
”Estaba picando la cebolla, poniendo el arroz para cocinar y fue un día que sentí raro.
”En mi sala tengo una Biblia, que empecé a leer en la mañana, el entrenamiento estuvo bien y no sé, sentía esa vibra, me sentía bien.
”Comencé a cocinar y cuando escuché la conferencia, me tomó por mucha sorpresa. Entonces, no sabía ni qué hacer porque estaba solo”, contó el contención santista.
Entre risas y con un tono de incredulidad en la voz dice: “Viera qué vacilón, aún estoy impactado”.
Incluso, en ese momento se le olvidó que estaba en plenas labores de cocina y que tenía que almorzar.
“Almorcé como a las dos horas, se me enfrió el arroz, lo que había cocinado, pero por dicha pude comer”, agregó.
La convocatoria le provocó una mezcla de emociones.
“Lloré, se me salían las lágrimas, llamé a mi novia que trabaja en una tienda y no me contestaba porque aún no había salido a la hora de almuerzo.
”Llamé amis papás, que pusieran el televisor, estaba superfeliz y les tuve que cortar porque ya no podía ni hablar. Fue un momento demasiado impresionante en mi vida”, dijo.
Esa felicidad lo hizo caer en la cuenta de pensar que ahora tiene un gran reto por delante, porque el Mundial de Rusia está a la vuelta de la esquina.
“Es importante, la oportunidad se da en un momento demasiado importante.
”Estamos demasiado cerca del Mundial y ahora que (Óscar Ramírez) me toma en cuenta, hay que aprovechar este llamado, es mi primera convocatoria para un partido y lo que prometo es trabajar”, afirmó.
De una vez anuncia que él llega a competir por un puesto.
“Sé los jugadores que hay: Celso (Borges), (David) Guzmán, Yeltsin (Tejeda). Los respeto y los admiro, ahora hay que ir a trabajar, es competencia y, dentro de la Selección, la competencia es muy sana”, dijo.
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