Sporting de Bryan Ruiz sufre hasta el final
Bryan Ruiz y su equipo, el Sporting de Lisboa, pasaron serios apuros para clasificarse a los cuartos de final de la Europa League.
El conjunto de Portugal perdió la vuelta 2-1 ante el Viktoria Plzen de República Checa, pero el globalde3-2 le dio el pase a la siguiente ronda.
Los portugueses llegaron este jueves con ventaja de 2-0; sin embargo, su rival empató la serie en su casa y eso obligó a los tiempos extra.
Antes de llegar a esa instancia, el Sporting desaprovechó un penal en el 90’, lo que hubiera evitado jugar 30 minutos adicionales.
Bas Dost falló desde el manchón blanco y, de forma increíble, Bruno Fernandes tampoco logró rematar efectivamente cuando le quedó el balón en los pies.
Pese a esa desazón, el Sporting tuvo la oportunidad de reivindicarse y dejar eliminado al Viktoria en su campo.
El tanto luso llegó en pies de Rodrigo Battaglia, en elminuto 105.
Para ese momento, el tico Bryan Ruiz, quien empezó de titular, ya no estaba en elcampo, pues salió en el 99’.
Con la alegría del gol, el Sporting debió defenderse a muerte para cuidar su boleto.
El sufrimiento se extendió con cada amenaza del Plzen y lo mal que se resguardaban los de Lisboa.
El arquero Rui Patricio fue figura, al rechazar varios balones peligrosos.
Otros juegos. Mientras, con un doblete de FernandoTorres, el Atlético de Madrid finiquitó su pase a los cuartos de final de la Liga Europa al aplastar ayer 5-1 al Lokomotiv de Moscú.
Marsella avanzó tras una victoria 2-1 en la cancha del Athletic Bilbao, en un partido que estuvo marcado por desmanes de los aficionados.
La Lazio certificó su boleto con un triunfo a domicilio 2-0 ante el Dínamo de Kiev, mientras que el Arsenal inglés derrotó 3-1 al Milan italiano y lo mandó de vuelta a casa con un global de 5 a 1.
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Les juro que no estoy en campaña para botar a Vladimir Quesada. Simplemente no comparto su empecinamiento en relegar aDaniel Colindres. Solo en su credo, Saprissa no extrañaría a quien en la práctica es su delantero más desequilibrante, el gran preparador del gol, el símbolo de su juego profundo.
Colindres no está para discutir si merece o no la titularidad tras la suspensión de dos fechas… Él ya superó con creces eso de volver a empezar como escarmiento. Lo suyo es abrir la cancha para que Saprissa vuelque por el costado izquierdo del campo, pegadito a la raya, su amplitud, agriete las defensas, genere espacios y monte el preámbulo del gol.
Como preparador o como goleador, este futbolista de debut tardío en Primera –24 años– no dispone de tiempo para dilapidarlo en tonterías, privando al equipo de un referente y guía. Veo delanteros desde finales de los 60’ y Daniel es de los pocos futbolistas en el país que encarnan la esencia del juego, el gusto por el espectáculo y el respeto por la grada.
Por condiciones y calidad pudo formarse en el Saprissa de cualquier época, desde la temible Máquina de los 50’, con Alex, Catato, Marvin y Álvaro Murillo, hasta el excampeón de los 70’. Allí en ese equipo podría patrullar el frente de ataque con Odir, cansarse de tirar paredes con Edgar Marín y sacudir las redes con frenesí cada vez que Hernán Morales o Yuba Paniagua descargaran la pelota en él. Bendito tiempo si tuvieras control remoto…
Su juego es un compendio de los grandes valores del ADN morado que pregonaron los padres fundadores, desde Beto Fernández y don Ricardo, hasta los maestros modernos, como el profe Watson.
Precisamente con don Carlos alcanzó su etapa de esplendor, porque el timonel entendía que el equipo se armaba alrededor de una idea de juego que se respeta a ultranza y que en este equipo, indefectiblemente, significa jugar bien.
Bajo la guía experta de Watson, Daniel fue símbolo y bandera, pelota al pie, con un repertorio amplio de jugadas y amagues, que instalaron el festejo en la grada y el elogio encendido de los cronistas.
Colindres tiene 33 años, está en esa etapa de la vida en la que un futbolista empieza a ver la jubilación en camino, y por tanto se merece vivir a plenitud lo que le resta porque lo echaremos de menos. Ahora que comenzó la cuenta regresiva para conocer la prelista de la Selese vale solidarizarse con el hombre que salta a la cancha –cuando lo alinean– para alegrarnos las tardes de domingo. Y eso vale mucho.
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