La Nacion (Costa Rica)

Johan Venegas ingresó con aplausos, pero salió chiflado

- Fiorella Masís A. fiorella.masis@nacion.com

Johan Venegas tiene una historia de momentos buenos y malos con la afición de Saprissa, aunque son más los negativos, por lo que no consigue ganarse a los morados.

Esto quedó demostrado ayer en la Cueva ante Herediano, cuando ingresó de cambio en el minuto 26 para suplir a Marvin Angulo, quien salió lesionado por una distensión en el aductor de la pierna izquierda.

Desde la banca, el volante se levantó, no tuvo tiempo para calentar, pero ingresó impulsado por los aplausos de los seguidores tibaseños.

Era un buen inicio para un jugador que durante el campeonato ha mostrado bajo nivel y desde las gradas es recriminad­o constantem­ente.

Sin embargo, esa energía positiva fue desapareci­endo poco a poco. Para Saprissa la variante fue perder, porque Angulo estaba jugando bien y Venegas no marcó mayor diferencia.

La gota que desbordó la paciencia morada se dio en el minuto 72, cuando el futbolista quedó solo frente al marco, con libertad para medir el remate y eso no sucedió. Por el contrario, se apresuró y envió un disparo muy por encima del marco defendido por Leonel Moreira.

Antes de esa acción ya había uno que otro silbido en su contra, pero a partir de esa jugada aumentó la cantidad de personas chiflando.

Algo es cierto: la afición morada ya no lo perdona. Se puede decir que le dieron el beneficio de la duda cuando entró y rápidament­e le estaban cobrando su rendimient­o.

Tampoco se puede culpar a los seguidores de laS, porque el atacante tiene oportunida­des comoestas para reivindica­rsey las desaprovec­ha. La opción ante el Team fue muy clara, de esas quepráctic­amente se gritan como gol antes de tiempo.

No habló. Desde el camerino morado, a veces parecen no encontrar explicació­n. Víctor Cordero, asistente técnico, dijo que Venegas tiene gran fuerza para aguantar lo que le ha tocado vivir en estos meses.

Pese al difícil ambiente que lo rodea, lo ven con tranquilid­ad, porque casi que fecha a fecha esa relación con los aficionado­s es tema de conversaci­ón.

Incluso, el jugador esta vez no quiso dar declaracio­nes, pasó frente a los medios de comunicaci­ón y con su mano indicó que no iba a hablar. Algo extraño en él, porque normalment­e, en buenos y malos días, da sus explicacio­nes.

“Él está tranquilo, tiene un carácter muy bueno y mente positiva”, asegura su compañero Heiner Mora. “El apoyo es total, incondicio­nal”, agregó por su parte Michael Barrantes.

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RAFAEL PACHECO Johan Venegas disputa un balón con el herediano Juan Pablo Vargas, en el juego de ayer.

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