Un nuevo test de sangre detectaría riesgo de alzhéimer
→ Examen hallaría la proteína relacionada con trastorno antes de percibir síntomas
El alzhéimer no tiene cura, no hay una forma exacta de prevenirlo y, cuando comienzan a verse sus primeras señales, este trastorno neurológico ya está avanzado. Entonces, solo pueden tomarse medidas para retardar su progreso y darle calidad de vida al paciente.
Sin embargo, un grupo de científicos alemanes logró dar con un examen de sangre que detectaría los primeros indicios de formación de esta patología (aun antes de mostrar síntomas), lo que ayudaría a que médicos y familias puedan tomar mejores decisiones respecto a los afectados.
Eventualmente, esto también podría abrir nuevas puertas para la investigación y el desarrollo de futuros medicamentos para tratar este mal.
El alzhéimer es el tipo de demencia más común. Consiste en un proceso neurodegenerativo crónico, caracterizado por la pérdida progresiva de la memoria y de la capacidad de quienes lo padecen para realizar actividades básicas.
Se cree que avanza durante cerca de 15 años de cuando comienza a manifestarse.
Una de las características de este trastorno es la formación de placas de la proteína beta-amiloide en el cerebro.
Con esto en mente, los investigadores de la Universidad Bochum, en Ruhr, Alemania, idearon un examen que pudiera medir las moléculas tóxicas de la proteína en la sangre y detectarlas antes de que formen placas en el cerebro. Los resultados se publicaron en la revista EMBO Molecular Medicine. El desarrollo del test. El examen consiste en medir los niveles de esta proteína en la sangre con una tecnología llamada sensor inmunoinfrarrojo. De esta forma se verían cuáles proteínas beta son tóxicas para el cerebro y cuáles son saludables.
Según la publicación, la proteína patológica es rica en una sustancia que se acumula. La versión sana de esta proteína no tiene esa característica, la cual se detecta con el sensor.
También se determina si están presentes ambas versiones de la proteína y en cuánta concentración cada una.
En la primera parte del estudio, el equipo se enfocó en pacientes que presentaban ya algún tipo de deterioro cognitivo.
Al someterlos a la prueba, los científicos detectaron que la proteína sí se veía en la sangre de quienes tenían un deterioro menor, mientras que en las resonancias magnéticas, las placas beta-amiloides se comenzaban a ver cuando el deterioro cognitivo ya era moderado.
El siguiente paso era probar si este examen podría registrar cambios en la sangre desde mucho antes. Para ello trabajaron con 65 adultos mayores sin deterioro cognitivo y los compararon con 809 personas con alzhéimer (grupo control).
El ensayo logró hallar signos de la enfermedad incluso a ocho años del inicio de los síntomas. Se identificó correctamente el 70% de los casos antes de que apareciera la enfermedad. La precisión del diagnóstico, según el estudio, es de 86%.
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