Sector del PUSC corre para reformar sus estatutos
→ Artículo 60 prevé renuncia de quienes integren el gabinete de otro partido
Un sector de la Unidad Social Cristiana (PUSC) corre para intentar reformar los estatutos de este partido, a fin de evitar la expulsión de las figuras socialcristianas que asuman cargos en el gabinete del presidente electo, Carlos Alvarado.
Lo hace porque el artículo 60 del Estatuto del PUSC prevé la renuncia tácita de los partidarios que acepten su postulación “para cualquier tipo de cargo en otro partido político”. A causa de ello, cualquiera de estas figuras se vería imposibilitada para optar a un cargo de elección popular en el 2022, pues la normativa socialcristiana les exige al menos dos años de militancia continua.
Solicitud. El jueves, un grupo de 27 delegados a la Asamblea Nacional del PUSC presentó al Comité Ejecutivo una carta solicitando realizar una sesión extraordinaria, el 29 de abril, para discutir una reforma al citado artículo.
Pablo Heriberto Abarca, secretario general y diputado electo del PUSC, indicó que se requerirá que la mitad más uno de los delegados a la Asamblea estén de acuerdo para cambiar la norma.
La actual diputada, Rosibel Ramos, una de las impulsoras de la modificación, confirmó que la necesidad de reformar los estatutos se da a raíz de la posibilidad de que Alvarado ofrezca cargos en el Poder Ejecutivo a militantes rojiazules.
El presidente electo manifestó, desde marzo pasado, que la excandidata socialcristiana a la vicepresidencia de la República, la economista Edna Camacho, será la coordinadora de su equipo económico.
El jueves de esta semana, además, confirmó a La Nación que el excandidato presidencial del PUSC, Rodolfo Piza, su principal aliado político, está entre los nombres que el mandatario electo baraja para ocupar el Ministerio de la Presidencia.
Empero, Rosibel Ramos rechazó que la reforma se planee para favorecer a Camacho y a Piza. Afirmó que, desde finales del año pasado, los delegados del PUSC ya habían pensado en la modificación del Estatuto previendo que Piza llegara a la Presidencia a convocar un gobierno nacional.
“Si algún compañero o compañera tiene la opción de apoyar y de ayudar en este gobierno, pues que no necesariamente pierda la militancia en el Partido y pueda seguir siendo parte del PUSC. Diríamos que es como una autorización que le daría el Partido para poder colaborar, apoyar a otro gobierno de otra ideología”, dijo Ramos.
El problema de fondo es que el mismo artículo 60 obliga a los socialcristianos que deseen aspirar a cargos de elección popular en los próximos comicios a tener por lo menos dos años de militancia “continua y claramente verificable”. En cambio, exime de la penalización a los militantes que desempeñen un cargo público, con prohibición de participación política, en un gobierno socialcristiano.
El diputado Rafael Ortiz, quien también le dio su respaldo a Carlos Alvarado para la segunda ronda, agregó que la reforma estatutaria iría en beneficio del país. “Yo estoy de acuerdo con doña Rosibel y don Johnny Leiva (actual legislador), que fueron quienes me plantearon la inquietud”, manifestó.
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