Cambio a medias
Dobles, de corregir el asunto. Tenemos negocios y casas de habitación revueltos, no hay ordenamiento urbano. La Municipalidad de San José, por ejemplo, ha entregado patentes a manos llenas en barrio Escalante, sin importar la gran cantidad de familias que deben aguantar bulla, basura y ni qué decir de mesas de restaurantes en aceras y calles.
Al ayuntamiento tampoco le ha importado que una empresa constructora levante un edificio de más de 10 pisos en La California y tenga las calles despedazadas, agua filtrándose, hediondez por las descargas de las letrinas a altas horas de la noche y la bulla y suciedad desde tempranas horas y por alrededor de 15 horas diarias.
No hay congruencia entre los llamados del gobierno a preservar el ambiente y a respetar Visité la comunidad cabécar Tayní. Tienen una preciosa escuela, energía eléctrica y comunicación del ICE. Si solicitan una ambulancia del Seguro llega de inmediato. Me impactó los pocos productos que cultivan, los cuales están en malas condiciones. Tampoco hay lecherías, producción de pollos, huevos o chancheras. El Ministerio de Agricultura brilla por su ausencia. Esto es promover comunidades dependientes que no saben “pescar”. Otros enseñarán otro tipo de pesca.