Consejos de una tica para visitar París
París es un destino soñado por miles; solo el año pasado recibió casi 34 millones visitantes. Sin embargo, puede ser una de las ciudades más complicadas al momento de planear un viaje.
En esa admirada metrópoli vive la abogada costarricense Andrea Quesada Méndez, de 43 años, junto a sus dos hijas, Mariana, de 16 años, y Sofía, de 8.
Quesada llegó por primera vez a esta ciudad cuando era una niña, pues su papá realizó en Francia su doctorado y, a lo largo de su vida, siguió viajando al mismo lugar, hasta que el año pasado decidió instalarse en París definitivamente con sus hijas.
Estos son algunos de los consejos que compartió con La Nación para quienes viajen a ese destino, ¿De qué hay que cuidarse? Según ella, hay que tener cuidado al tomar excursiones o tours de empresas que no sean oficiales pues podría salir caro y no será del todo satisfactorio.
¿Cuál es la mejor forma para conocer la ciudad?
Quesada es enfática al indicar que “por cuenta propia” y aprovechando que la red de metro es grande y llega a todo lado. Se descarga en el teléfono una aplicación del metro y eso facilita los traslados. Se puede comprar un pase llamado Navigo Découverte, que le da acceso a todas las líneas de metro, bus, tram y RER (trenes que salen de París, como para ir a Versalles y Disney) de manera ilimitada. Se puede comprar para un día, semana o mes y se puede recargar si la visita se prolonga. También se puede guardar para un futuro viaje, pues expira en 10 años.
¿Cuál es la mejor época para ir y cuál es la peor?
La mejor es entre mayo y junio, así como de setiembre a noviembre, principalmente por el clima. La peor época es enero y febrero, y julio y agosto, cuando las temperaturas se prestan para que las personas enfermen.
¿Tips para la alimentación?
La tica indicó que un turista debe tener cuidado con los restaurantes, lo bueno es que tienen expuestos el menú y los precios. Otro punto importante es que en Francia el agua es potable, así que es sano y le ahorrará dinero si pide un pichel de agua: es gratis. Tenga en cuenta que es más barata una copa de vino que una gaseosa.
Sobre hospedajes, dice que es mejor buscar los que están en las afueras de París, siempre y cuando las líneas del metro lleguen cerca, pues es más económico y el servicio de metro es rápido y eficiente.