Navas ni siquiera ha fallado

Que alguien me explique cómo Keylor Navas va a la banca tan solo dos días después de recibir, en Mónaco, el premio al mejor portero de Europa.

¿Cómo el Real Madrid pudo hacerle eso al costarricense? Es que ni siquiera esperó a que se equivocara para relegarlo al banquillo.

La competencia del nacional es alta, tiene nada más y nada menos que al belga Thibaut Courtois, recién nombrado el mejor portero del Mundial Rusia 2018.

Los atestados de Courtois no están en discusión, pero sí la forma en que esto sucede.

Es un tema de respeto a la trayectoria y de que hace tan solo unas 48 horas, Keylor estaba en el olimpo del fútbol europeo.

Este juego frente al Leganés es el último del Real Madrid antes del parón por la fecha FIFA de setiembre, y hasta bien pudo ser una manera de brindarle un homenaje al costarricense manteniéndolo en la alineación estelar, para regocijarse frente a su afición, en el Santiago Bernabéu.

Lo que indigna es que en los partidos recientes no se registra un solo yerro del nacional.

Incluso, en el encuentro anterior ante Girona, victoria merengue 4-1, fue figura con dos tapadas de buena factura. Además, un gol del equipo merengue se inició con un saque rápido del nacional.

Era de esperarse que Courtois fuera titular, pero no así. No era el momento, ni lo más justo.

Si bien el belga llegó como el fichaje estrella del cuadro blanco, el técnico Julen Lopetegui pudo alinearlo desde el inicio de temporada; sin embargo, no hubo tacto para buscar el momento ideal para relegar a Navas.

Luego de ganar tres Champions de manera consecutiva y tener una buena nota en los primeros juegos, el Real no dudó en enviarlo al banquillo una vez que se cerró el mercado de fichajes europeo, al menos en las ligas top.

Navas no asistirá a la fecha FIFA de la Selección Nacional, mientras Courtois sí lo hará con su combinado patrio, que se enfrentará a Escocia e Islandia. Ahí volverá con mayor ritmo de competencia el belga.

¿Comenzó la debacle para el tico? Eso solo el tiempo lo dirá, pero al menos lo sucedido este sábado es una cachetada a lo que el mundialista de Brasil 2014 y Rusia 2018 le ha dado al plantel blanco.

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