Millonario japonés será el primer turista en la Luna
→Empresario compró todos los tiquetes que puso en venta la firma SpaceX de Elon Musk →Invitará a algunos artistas; nave volará alrededor del satélite natural de la Tierra
Elon Musk, dueño de la empresa espacial SpaceX, hizo el anuncio con bombos y platillos: una de sus naves viajará a la Luna en el 2023 e irá con un turista a bordo. El “afortunado” será un multimillonario japonés llamado Yusaku Maezawa, de 42 años.
Él sería el primer hombre en regresar al satélite natural de la Tierra, luego de los viajes tripulados que se efectuaron entre el 21 de julio de 1969 y el 14 de diciembre de 1972. En total, 12 astronautas visitaron la Luna en las misiones Apollo 11, 12, 14, 15, 16 y 17.
¿Pero quién es Maezawa? Las agencias de noticias dan cuenta que este asiático llegó a Estados Unidos, específicamente a Santa Mónica, California, a los 18 años.
Permaneció allí durante seis meses, para luego regresar a Japón, estudiar Música y ser baterista de “una banda muy ruidosa”, como él mismo lo ha descrito.
Según AFP, Maezawa llegó a convertirse en un empresario muy reconocido en su tierra natal, luego de crear la tienda de venta de ropa por Internet Zozotown. Con alrededor de $3.000 millones, actualmente él es la decimooctava persona más rica de Japón, según la clasificación de la revis-
Hasta ahora solo siete VIAJEROS: personas se han convertido en turistas espaciales. El primero fue el millonario estadounidense Dennis Tito, quien pagó unos $20 millones para estar fuera de la Tierra, entre el 28 de abril y el 6 de mayo del 2001. El segundo fue Mark Shuttleworth (Reino Unido) en el 2002, quien, a bordo de la nave Soyuz, pasó 11 días en el espacio. Otros turistas fueron el estadounidense Gregory Olsen (2005) y la iraní Anousheh Ansari (2006). También lo lograron el húngaro Charles Simonyi (quien viajó en dos oportunidades: 2007 y 2009), el estadounidense Richard Garriott y el canadiense Guy Laliberté (este último pagó $40 millones) .
ta estadounidense Forbes.
Asimismo, se le conoce por ser un gran coleccionista de arte contemporáneo. Precisamente, en en el 2017 pagó $110 millones por un lienzo sin título del célebre pintor estadounidense Jean-Michel Basquiat.
Dentro de sus colecciones también destacan obras de Pablo Picasso, Roy Lichtenstein, Andy Warhol, Alexander Calder y Jeff Koons
“Este amante de las artes ha promovido una fundación destinada a apoyar la creación y a sensibilizar al público y entre sus proyectos figura la apertura de un museo de arte contemporáneo en la ciudad de Chiba, al este de Tokio”, indicó AFP.
¿Cómo será su viaje? Por ahora se sabe que la misión será un “flyby” o una expedición alrededor del satélite.
Los pasajeros de la nave que logre la proeza podrán disfrutar de la vista de la Luna a corta distancia, volar alrededor de ella y, por supuesto, ver la Tierra desde el espacio.
Maezawa viajará con uno o dos astronautas, más seis u ocho artistas que él invitará, pero que aún no han sido seleccionados.
Todos irán en una amplia nave llamada Big Falcon Rocket, de la compañía SpaceX, que, en palabras sencillas, funciona como una “NASA (Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio) privada”.
Al parecer, el magnate asiático compró todos los asientos que dicha compañía puso en venta, pero hasta el momento no se ha revelado la suma de dinero que pagó por ello. Elon Musk se refirió a la suma como “una parte significativa del proyecto”.
Para el dueño de SpaceX, esta expedición a la Luna sería el inicio de algo más grande. Su sueño es transportar personas a Marte para colonizarlo, y en aras de lograr esta ambiciosa y costosa idea, ha dicho que necesita transformar el transporte aeroespacial en un negocio lucrativo.
La voz de Franklin Chang. “El espacio es un lugar de negocios, un lugar de trabajo, y debe ser democratizado, abierto a todo el mundo. Si es solo para unos cuantos selectos, entonces no vale la pena. El espacio nos hace la especie multiplanetaria más capaz de sobrevivir”, dijo Franklin Chang a La Nación. Agregó que el turismo espacial se inició hace varios años, cuando algunas personas pagaron tarifas “exorbitantes” para ir a la Estación Espacial MIR en la última década del siglo pasado y, más recientemente, a la Estación Espacial Internacional.
“A un costo menos alto, otros turistas pasarán algunos minutos en el espacio en los vuelos suborbitales que planea la empresa Virgin Galactic (otra compañía). Eventualmente, el volar en el espacio será tan común y asequible como lo es hoy volar en avión”, puntualizó Chang.
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