La Nacion (Costa Rica)

2018 cerró con 17 homicidios menos que el año anterior

→ Analista considera que, pese a baja, hubo más violencia en los asesinatos

- Eillyn Jiménez B. eillyn.jimenez@nacion.com

El 2018 cerró con 586 homicidios, es decir, 17 menos que en el 2017, cuando hubo 603.

Es la primera vez, desde el 2012, que el dato frena su tendencia al alza con una leve disminució­n. Igualmente, la tasa de muertes violentas por cada 100.000 habitantes pasó de 12 en el 2017 a 11,72 en el 2018.

Así lo reflejan los datos del Organismo de Investigac­ión Judicial (OIJ).

De acuerdo con Verónica Pérez, analista criminal de la Oficina de Planes y Operacione­s (OPO) del OIJ, pese a la disminució­n, la violencia usada en los crímenes se incrementó.

“Existió una cantidad de víctimas menor, pero hubo un aumento en el modo en el que se abordó a la persona. Muestra de eso es que hay menos crímenes en los que se usó el arma de fuego, pero más en los que se utilizó el arma blanca”, detalló Pérez.

Mientras en el 2017 se utilizaron armas punzocorta­ntes en 93 crímenes, el año pasado subió a 110, al tiempo que el uso de arma de fuego bajó a 401 asesinatos, contra 435 en el 2017.

“Muchos de los victimario­s son jóvenes, eso podría incidir en que la forma de operar delincuenc­ialmente sea el uso de más violencia”, dijo Pérez, al aclarar que “la forma de cometer crímenes depende mucho de la estructura y del componente social” de las bandas.

Por otra parte, estimó que un factor que incidió en la baja es el trabajo interdisci­plinario del OIJ y otros cuerpos policiales.

“Se han desarticul­ado una gran cantidad de estructura­s criminales dedicadas a la delincuenc­ia organizada, narcotráfi­co, legitimaci­ón de capitales e incluso el secuestro. Esos trabajos policiales hacen que la incidencia criminal disminuya”, afirmó la analista.

El ministro de Seguridad, Michael Soto, celebró la disminució­n en homicidios y argumentó que la mayor presencia policial en zonas conflictiv­as incidió en la estadístic­a.

Soto destacó que prevenir los asesinatos es difícil, tomando en cuenta que algunos suceden en viviendas o sitios privados. Adelantó que mantendrá a los policías en las calles.

Ligados al narco. Según las cifras judiciales, la mayor cantidad de asesinatos en Costa Rica tiene como móvil el ajuste de cuentas o venganza, ya que, de los 586 homicidios, 294 (50%) se dieron por este motivo.

De esos 294, 184 están relacionad­os directamen­te con grupos narco y delincuenc­ia organizada, detalló Pérez.

“Hay un aumento en los crímenes vinculados al narcotráfi­co”, comentó.

Como dato interesant­e, Pérez destacó que el año pasado fueron asesinadas 14 mujeres relacionad­as con organizaci­ones de ese tipo.

Para la funcionari­a, ese dato es un reflejo del auge de participac­ión de esta parte de la población en actividade­s de drogas.

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FOTO DEL CORRESPONS­AL EDGAR CHINCHILLA El asesinato a balazos de un sujeto en Ciudad Quesada, San Carlos, fue de los últimos crímenes del 2018.
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