Más ticos con el hábito de separar basura
Cada día, los costarricenses generan 4.000 toneladas de residuos ordinarios. De esta cantidad, 1.000 toneladas son depositadas en ríos, lotes baldíos y vías.
La situación es aún más preocupante si se considera que el 80% de lo que botamos son residuos valorizables, es decir, que se pueden reutilizar.
Pero, poco a poco, los ticos parecen comprender mejor el problema.
Por ejemplo, en el 2014 se estimaba que el promedio de reciclaje del país era de 1,26%, según datos del Instituto de Fomento y Asesoría Municipal (IFAM). Para el 2018, ese porcentaje se elevó al 6,6%, o lo que es igual, a 264 toneladas que llegan a los centros de acopio para ser procesadas.
Granito de arena.
Desde hace un año, Carlos Sibaja Mora comenzó a sumarse a las iniciativas de separación de residuos en el cantón de Montes de Oca.
“Algo ayuda uno para evitar la contaminación en el planeta, aunque es muy poco lo que uno hace, son granitos de arena que uno va aportando”, manifestó durante una visita al centro de acopio para dejar material revalorizable.
Con el tiempo, la práctica se ha convertido en un hábito y, si bien en un inicio pudo ser difícil, ahora forma parte de la rutina de su familia. Incluso, la separación de residuos le ha ayudado a tomar conciencia de la importancia de este proceso.
“Nos damos cuenta de que la basura que sacamos para que se la lleve el camión de la basura, es muy poca ahora. Antes sacábamos dos bolsas dos veces por semana, ahora es casi una bolsa por semana, quiere decir que el resto es lo que traemos aquí (...). Estábamos botando plata, prácticamente”, expresó.