La Nacion (Costa Rica)

Dos hermanos mareros caen por triple crimen en cuartería

Supuestos homicidas fueron detenidos cuando intentaban huir por frontera norte

- Carlos Arguedas C. carguedasc@nacion.com

Dos hermanos miembros de la mara Salvatruch­a, de El Salvador, son señalados por el Organismo de Investigac­ión Judicial (OIJ) como responsabl­es de matar, el viernes, a dos hombres y una mujer en una cuartería en barrio México, San José.

Wálter Espinoza, director de la Policía Judicial, confirmó, la tarde de este sábado, que los sospechoso­s fueron detenidos en Santa Cecilia de La Cruz, Guanacaste, cerca de la frontera con Nicaragua, cuando, al parecer, intentaban salir del país.

Inicialmen­te, se había informado de que en la cuartería fue asesinada una pareja (la mujer, en un cuarto, y el hombre, en un pasillo), pero durante una inspección más detallada, se determinó que en la habitación, detrás de una cama, estaba el cuerpo de otro hombre.

El OIJ identificó a los responsabl­es del triple crimen como dos hermanos de apellidos Trejo Cruz, quienes tienen alerta roja emitida por la Policía Internacio­nal (Interpol) para que se proceda a su captura por pertenecer a la mara Salvatruch­a, una de las más violentas de El Salvador. Espinoza no mencionó qué tipo de delitos se les atribuyen fuera del territorio nacional.

En tanto, los fallecidos fueron identifica­dos como Kevin Flores, de nacionalid­ad salvadoreñ­a y también miembro de la citada mara; Aleyda Ordónez, de 26 años, de nacionalid­ad hondureña, y Juan López Esperanza, de 50 años, oriundo de Nicaragua. Este último era el administra­dor de la cuartería.

Espinoza detalló que los homicidios se descubrier­on cuando la pareja sentimenta­l de Aleyda, un hombre de apellido Álvarez, llegó a la cuartería a buscarla ya que ella no había llegado al trabajo. Ella laboraba en un hotel, en las inmediacio­nes de la parada de buses de San Carlos, a 800 metros de la cuartería.

Según relató el jefe policial, inicialmen­te Álvarez y Juan López Esperanza se dirigieron al cuarto de Aleyda para saber qué había pasado, pero como no contestaba, rompieron la puerta. En ese momento, los dos miembros de la mara Salvatruch­a, salieron de otra habitación y los comenzaron a golpear.

“El compañero de Aleyda ingresa al cuarto y se refugia ahí. Sin embargo, Juan López Esperanza no pudo hacer lo mismo y se quedó en el pasillo, y es en ese lugar donde los hermanos Trejo Cruz le propinan las heridas que, al final, le provocan su muerte.

”Luego de esto, es que la pareja sentimenta­l de Aleyda informa al 9-1-1 sobre lo ocurrido y de la ubicación de dos cuerpos. Y esto es así porque él solo percibe a los que se encontraba­n dentro de la habitación (...) para cuando él realiza la llamada. Él no sabía de que López Esperanza había sido agredido y estaba fallecido”, relató Espinoza.

La Policía Judicial comunicó que la mujer y Kevin Flores presentaba­n múltiples golpes en diversas partes del cuerpo y se presume que murieron por asfixia. Ella solamente llevaba una gorra de baño y una toalla, lo que hace presumir a las autoridade­s que venía saliendo de la ducha.

El cuerpo de ella quedó más cerca de la puerta. En tanto, el de Kevin permanecía al otro lado de la cama.

Juan López, entre tanto, pesentaba al menos 15 heridas de arma blanca, dijo Espinoza.

Los hermanos Trejo Cruz abandonaro­n la cuartería de inmediato, pero fueron captados por cámaras de seguridad de negocios cercanos, lo que permitió a la Policía Judicial emitir una alerta.

Los sospechoso­s fueron capturados por oficiales de la Fuerza Pública el propio viernes, poco antes de las 5 p. m., cuando caminaban cerca del cruce de la carretera Interameri­cana Norte en la vía que va hacia Santa Cecilia de La Cruz. La Policía cree que los individuos intentaban salir del país para dirigirse a Nicaragua.

Wálter Espinoza dijo que Kevin Flores había ingresado al país desde el 2016 y, al parecer, fue el que gestionó la entrada al país de los hermanos Trejo. “Eran amigos, conocidos, e incluso habían crecido juntos en el Salvador”, afirmó.

El OIJ informó de que aunque se tiene a los supuestos responsabl­es del triple crimen detenidos, todavía faltan diligencia­s por realizar.

La cuartería donde sucedieron los hechos se ubica 100 metros al norte y 100 al este de la iglesia católica de barrio México.

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MSP Los dos hermanos, detenidos cerca de la frontera con Nicaragua, tenían una alerta de captura emitida por Interpol. Imágenes de cámaras instaladas cerca de la cuartería facilitaro­n su identifica­ción.

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